Víctor Claver Arocas (Valencia, 1988) cumplirá 150 encuentros este domingo en la liga ACB. Aquel chico desgarbado y flaco, que saltó a la competición nacional con el entonces Pamesa Valencia en la temporada 2006-07, se ha hecho mayor a golpe de partido. Ha madurado hasta convertirse en el máximo estandarte del club valenciano, y ostentar la capitanía. Con un enorme talento, que ya le hizo despuntar en las filas del Maristas donde se formó, las lesiones sin embargo han impedido que su progresión haya sido mayor. Han sido su gran lastre. Campeón del concurso de mates de la ACB en 2008, y elegido en primer ronda del draft de 2009 (puesto 22) por los Portland Trail Blazers, Claver aún tiene margen para crecer. En lo personal, y en lo profesional. El último año fue especialmente complicado para él. Además de los problemas físicos, perdió a su padre, su gran referente. Una nueva prueba de madurez. "Estoy contento de haber crecido y haber cumplido tantos partidos aquí en Valencia. Estoy encantado de celebrarlos y ojala sean más", comentaba ayer.

Ahora, que acaba de recuperarse de una fractura en un dedo del pie, de nuevo se espera todo de él. Gran parte de lo que el Valencia BC pueda conseguir esta temporada pasa por sus manos. De hecho, este domingo, su aportación se sabe trascendental para lograr el objetivo de estar en la Copa del Rey. Allí, en la pista del Joventut de Badalona, será donde logrará la cifra de 150 compromisos disputados en la máxima categoría del baloncesto español. "Podrían haber sido muchos más si no fuera por las lesiones", reconocía ayer en unas declaraciones facilitadas por la entidad. Su recuerdo más especial en estas ocho temporadas en la ACB le viene del debut, en la pista del FC Barcelona. " Ese partido lo recuerdo de forma muy especial porque fue en un campo como el Palau, donde no tuve muchos minutos pero sí que lo recuerdo con especial cariño". Y su primer punto, en un lanzamiento de tiro libre, en la Fonteta ante Gran Canaria, unas jornadas más tarde.

Otro de los momentos memorables en su carrera fue el título de la Eurocup conseguido en 2010. Suyos fueron los dos primeros puntos de la final, en forma de explosivo mate. Su mejor anotación ha sido ante el Gran Canaria con 24 puntos, mientras que su mejor valoración fueron los 28 ante el Baloncesto Fuenlabrada. En los 149 partidos que Claver ha disputado hasta la fecha, lleva una media de 7 puntos y 4 rebotes. Ahora espera "seguir creciendo, hacer que Valencia tenga un buen nivel tanto en España como en Europa y ayudar a que lo consiga, y que eso me ayude a mi a crecer como jugador". Un brillante final para el aniversario del domingo sería la consecución del pasaporte para la Copa del Rey, algo que pasa por derrotar al Badalona.