Por segunda jornada consecutiva, Pablo Hernández y Paco Alcácer se quedaron fuera de la lista de convocados de Mauricio Pellegrino, un síntoma inequívoco de que su futuro inmediato puede estar lejos de Mestalla. El técnico valencianista ha insistido en que cuenta con los dos jugadores y los considera válidos, pero por distintos motivos no entran en los planes inmediatos del equipo.

Por un lado, desde el cuerpo técnico ha decepcionado la actitud de Pablo, al que se ve rendido de antemano, resignado a no poderle competir la titularidad a Soso Feghouli. No se duda de su calidad y se asumía que a lo largo de la competición iba a contar con muchas titularidades, pero es la actitud es la que le ha cerrado las puertas de las dos primeras listas. Por esos motivos, el Valencia, comprensivo con los deseos de marcharse del jugador -expresados personalmente a Manuel Llorente, Braulio Vázquez y Pellegrino-, no desea malvender a un futbolista con cartel y que dejaría muy tocada la banda derecha del ataque a pocos días de cerrarse el mercado.

El Swansea galés es el mejor posicionado. La presencia de Michael Laudrup en el banquillo es uno de los alicientes, sino el principal, para Pablo. El exmediapunta danés fue entrenador del extremo castellonense en el Getafe, cedido por entonces por el club de Mestalla, en la que fue su primera campaña en la elite. El conjunto revelación de la Premier ofrece 5 millones, una cifra muy por debajo de las pretensiones del Valencia. También ha sonado la opción del Dinamo de Moscú, que a pesar de ser una opción menos apetecible, desde el punto de vista deportivo, sí satisfacería el apatado económico, tanto del jugador como posiblemente del club.

Alcácer, cuestión de minutos

Diferente es el caso de Paco Alcácer. Pellegrino ha manifestado que cuenta con el joven delantero y que lo ve como un futbolista del primer equipo, con independencia de la presencia de Roberto Soldado y el fichaje de Nelson Valdez. Sin embargo, con 19 años, el atacante de Torrent quiere contar con minutos y no ver estancada a corto plazo una progresión que se augura espectacular. La alternativa de una cesión a un conjunto de Primera es la solución más provechosa para las dos partes. Se repetiría el método utilizado en casos como el de Pablo Hernández, Silva o Raúl Albiol, que ganaron experiencia y galones en la elite antes de volver a Mestalla como jugadores del primer equipo de pleno derecho. El Getafe es el principal interesado, pero también se mantienen al acecho el Valladolid y el Celta de Vigo. Todos garantizarían minutos al delantero.

Tampoco entró en la convocatoria Aly Cissokho, del que todavía no se ha recibido el transfer, y los lesionados Banega y Canales.