Los jeques han irrumpido en el mundo del fútbol a base de talonario. Su pasión por el esférico les ha llevado a hacerse con el control de grandes clubes europeos con suerte diversa. Pero también se han hecho con la mayoría de emisiones deportivas a nivel mundial. De ahí que el control de la Liga esté cada vez más bajo el control de la cadena árabe, Al Jazeera Sports.

Sogecable y Mediapro, los actuales dueños de los derechos audiovisuales de los equipos en España han decidido ya abandonar el negocio porque las cuentas no salen. Se comprometieron cientos de millones de euros para seducir a los clubes de fútbol y ahora están pagando las consecuencias. Y es el gigante catarí el que anhela el macrocontrato de la liga española. Al precio de convertir la liga española en una auténtico caos horario. Con el arranque de temporada de la Liga BBVA se ha vuelto a abrir un nuevo debate. Pero lo cierto es que este desmadre ha llegado a su punto más álgido con los partidos de agosto.

Y es el mundo árabe el que tiene ahora la legitimidad para organizar a su antojo los partidos de fútbol. Atrás han quedado los tiempos en los que no se discutía sobre si el partido era viernes, sábado o domingo. O si se jugaba por la mañana, por la tarde o por la noche. Casi todos se disputaban a la vez y el mismo día. Tiempos de transistor y marcador simultáneo.

Ahora ha llegado un momento en el que estamos acostumbrados a la fuerza a la dinámica del partido del viernes a las once de la noche (el pasado encuentro del Levante UD y el Rayo Vallecano y ayer mismo Osasuna-Villarreal) o incluso el lunes por la noche, para desesperación de los espacios radiofónicos deportivos.

La liga de futbol española quizá es la que más está pagando el pato, pero no la única. De las cuatro grandes ligas ninguna disputa partidos entre semana (a no ser que sea por alguna competición fuera de lo habitual, como los recientes partidos Friburgo-Bayern y Aston Villa- Chelsea, forzados por la disputa de la Supercopa del pasado viernes), la mayoría son sábado o domingo en un régimen horario de 15.30 a 21.oo horas.

Proyección mundial

La cadena Al Jazeera es propiedad del jeque Sheikh Hamad Bin Thamer al-Thani y está vinculada al gobierno de Catar. Emite en multitud de países a través de vía satélite y dispone de una audiencia potencial de más de doscientos cincuenta millones de telespectadores.

Recientemente ha llegado a un acuerdo con Francia donde posee ya los derechos de la Liga gala (hasta 2018) y en los últimos meses se ha hecho con el dominio de la Premier League. Lo que le ha obligado a cerrar cuatro canales en el satélite Hot Bird y Nile Sat. Ahora sólo emite ocho canales en digital y alta definición y una gran variedad de competiciones internacionales. La contrapartida es el cambio de horarios en Inglaterra. Su comercialización es a través de tarjetas y dispositivos a un precio anual que no llega a los cien euros.

La emisora que comenzó siendo gratuita y financiada por el gobierno de Catar se ha convertido en el principal canal de noticias del mundo árabe y hasta hace unos meses en la cadena que proyecta el futbol en cualquier rincón del planeta. Controla las mejores competiciones futbolísticas de todo el mundo como es la Ligue 1 francesa, el Calcio italiano, la Eredivis holandesa, la Championship inglesa, los torneos apertura y clausura de Argentina, la liga brasileña, el Soccer de Estados Unidos, la liga suiza y la rusa, entre otras como la NBA, MotoGP, la Copa de Europa de baloncesto, la liga mundial de voleibol, etcétera.

Al Jazeera Sport continua ampliando sus canales, para dar cobertura a todos sus derechos, que no paran de crecer... al precio de volver loca a la afición futbolística de casa, porque necesita llenar su programación de 24 horas con competiciones deportivas de primer nivel.

El reciente crecimiento de clubes a base de petrodólares ha hecho que países emergentes abran una línea de negocio en nuestro país. Como ocurre con la aerolínea catarí «Qatar Airwyais» que patrocina al club azulgrana o «Fly Emirates» al Real Madrid. Qué además de pagar cantidades extremas les sirve de plataforma de promoción.

Incógnita

Los derechos de televisivos son necesarios para que los clubes puedan sobrevivir, pero la duda es si al final van a consolidar el duopolio Real Madrid-Barcelona, cada vez más acusado para el resto de equipos de la liga española. Y nadie hace nada por solucionarlo, pues el resto de clubes de la Liga de Fútbol Profesional han asumido tanto la desigualdad de reparto como los horarios con sumisión (apenas alguna declaración como la reciente del presidente del Villarreal, Fernando Roig, quien aseguró que «Los aficionados y los equipos hacemos un sacrificio al aceptar algunos horarios, pero se puede dar por bueno si al final se logra ese reparto equitativo. Pero si nos sacrificamos con estos horarios y el reparto es para los de siempre, ya no estoy de acuerdo con ellos»). De hecho la misma televisión que se encarga de emitir los partidos sólo siente interés por estos dos clubes. Son los que más venden a nivel internacional. El rival es el convidado de piedra. Con este sistema de reparto, la liga española está condenada más a un duopolio que a una competición abierta.

El resultado es notable, nunca se había producido una desigualdad tan grande entre el Barcelona y el Madrid y el resto.