Este sábado visita El Madrigal el Real Madrid. Un equipo en el que es difícil destacar a alguien. La muestra es ver en el banquillo a un campeón del mundo y doble campeón de Europa como Iker Casillas. Pero está claro que el peligro blanco llega por las bandas. Con la incógnita de saber si jugará el último gran fichaje galáctico Garath Bale sobre todo tras haberse resentido de unas dolencias musculares, lo más probable es que el fichaje más caro de la Liga se estrene en El Madrigal y lo haga jugando por la banda derecha, dejando a Cristiano Ronaldo por la izquierda.

De ser así, ya que la posición de Bale no está aún muy claro debido a que naturalmente ha jugado siempre por el carril izquierdo, hay dos hombres que van a tener sin duda un trabajo extra este sábado por la noche. Jaume Costa y Mario Gaspar deberán parar a dos de los mejores jugadores del mundo, o al menos así lo dice su precio.

194 millones contra 0

93 millones costó el internacional luso en su día, mientras que el galés se ha fijado su compra en 101 millones -millón arriba o abajo-, lo que supone casi 200 millones de euros. Enfrente tendrán a los laterales amarillos llegados a coste cero, ya que ambos proceden del filial. Sin duda, para conseguir frenar a estas dos bestias negras o blancas, según se mire, tanto Mario como Jaume van a tener que jugar el partido de su vida. El rival así lo merece, sobre todo para el lateral izquierdo quien se estrenará por primera vez ante los blancos, conocedor de que gran parte de España le estará mirando porque su tarea será conseguir que Bale no demuestre que vale los 101 millones que se ha pagado por él, trabajo difícil pero no imposible.

«Da igual a quien tenga delante. Ellos son un equipo de gran calidad. Está claro que nosotros no jugamos en esa Liga pero estamos muy ilusionados en intentar complicarles la victoria», aseguraba el valenciano en Radio Vila-real. Recientemente renovado hasta 2017, Jaume Costa afronta este duelo «100% ilusionado» y con la esperanza de «que ellos no tengan un buen día y nosotros tengamos el mejor».

Aunque una cosa está clara, tanto Real Madrid como Villarreal llegan a esta cuarta jornada con los mismos puntos , 9, aunque para Jaume Costa estaría jutificado si el submarino no pudiese proseguir con la buena racha de este arranque liguero.

Sin embargo se le puede atribuir un punto flaco a este Real Madrid, y también se llama Bale. Con lo que ha costado y la expectación que despierta, el presidente Florentino Pérez está deseando explotar su inversión en el campo, aunque ello signifique que aún no le haya dado tiempo a adaptarse al equipo. Todo ello se une a la marcha de Ozil, que ha dejado tocado el vestuario, y al sistema táctico que está modificando Ancelotti para dar cabida en el once a Bale y Cristiano. «Ellos están en pleno rodaje, no tienen aún un estilo de juego definido. Todo lo contrario a nosotros, que llevamos jugando igual desde la mitad de la pasada temporada y prácticamente somos el mismo equipo. Eso nos hace estar muy compenetrados. Esperemos que esa baza sea importante y decline la balanza a nuestro favor», señalaba el defensa amarillo, que espera recordar para siempre su estreno ante el Real Madrid.

A por el triunfo 200 en Primera División

El Villarreal buscará sumar su triunfo 200 en la Liga BBVA este sábado ante el Real Madrid. Y no sería la primera vez que el conjunto cae ante el submarino porque justamente hincó la rodilla en la victoria 150 del equipo villarrealense en la máxima competición. Eso fue el 16 de mayo de 2009 en un partido muy intenso que acabó con un ajustado 3-2. Muy sonada fue aquella victoria. Fue la temporada 2008-09. Los goles de Capdevila, Pires y Cani, pudieron con los de Van de Vaart e Higuaín, para el 3-2 final ante el delirio de la afición amarilla.

La primera victoria del Villarreal en la élite del fútbol español tuvo lugar el 26 de septiembre de 1998, en la cuarta jornada de Liga de la temporada 1998-99. Fue sonada porque el equipo entrenado por José Antonio Irulegui venció por 5-0 al Salamanca, con goles de Craioveanu y Alfaro, ambos por partida doble, y Antonio Díaz. j.f.roca vila-real