El Valencia BC encara ahora tres partidos consecutivos en la Fonteta, que abre hoy contra el CB Valladolid, y que aprovechará para recuperarse del desgaste físico de los desplaazamientos. El propio Perasovic incidía en ello. «Siempre después de una derrota es mejor jugar en casa, a ver si podemos conseguir la victoria. Es evidente que después de dos partidos seguidos fuera de casa en los que el equipo acusó demasiado el viaje y estar lejos de nuestros aficionados, en ese sentido nos viene bien jugar aquí», señalaba. El adversario de esta tarde, dirigido por Ricard Casas, no debería presentar mayores problemas. Se trata de «un equipo en plena construcción», como destacaba Perasovic, y aunque «con jugadores de nivel» según el entrenador balcánico, no suponen ningún escollo insalvable. «Es un equipo que va a venir aquí a luchar y a jugar un partido intenso», concluía.

Al frente del Valladolid regresa a la Fonteta Casas, que entrenó al Pamesa Valencia entre 2005 y 2006, y que lo hace «con muy buenos recuerdos». «Tuve un excelente trato en el sentido profesional, hubo muy buenos momentos y por ello me alegro que la línea del club esté solidificada y en clara mejora», manifestaba ayer el catalán. El Valladolid no arrancó la pretemporada hasta mediados de septiembre, lo que le obligó a construir su plantilla en un tiempo récord. Sumó la primera victoria en la pasada jornada ante el Cajasol (81-68).

Mes y medio sin Dubljevic

Las peores previsiones se cumplieron ayer, y Bojan Dubljevic estará seis semanas de baja por una luxación en el hombro izquierdo sufrida el pasado miércoles en Liublijana. Esta lesión se suma a la de Pau Ribas, que lleva tres semanas recuperándose de un esguince de tobillo, pero el Valencia Basket Club no se plantea de momento buscar ningún refuerzo. Ribas no tardará en incorporarse al equipo, y el cuerpo técnico entiende que la línea interior está suficientemente apuntalada. En cualquier caso, la ausencia de Dubljevic se dejará sentir en el seno del equipo pese a no gozar, incomprensiblmente, de la titularidad desde que arrancara la temporada. A nadie se le escapa que el jugador montenegrino es uno de los principales puntales de la plantilla, junto con Justin Doellman. Además de la luxación, en las pruebas médicas a las que se sometió el pasado jueves, también se le detectó una dolencia en el labrum, un cartílago que rodea la articulación.

Velimir Perasovic entiende que la polivalencia de Vladimir Lucic puede neutralizar la pérdida de Dubljevic. El técnico croata trataba de relativizar ayer, quitando trascendencia al tema de las lesiones. «Son algo que no puedes prever nunca. Son dos bajas importantes pero tenemos que pensar que los jugadores que tenemos son capaces de sobreponerse a estos contratiempos y que podemos ganar sin ellos», afirmaba.