Keylor Navas Gamboa (Pérez Zeledón, Costa Rica, 1986) es un seguro de vida bajo palos. El guardameta del Levante UD, que acaba contrato en junio de 2015, se ha erigido en una de las piezas decisivas esta temporada en el buen momento del conjunto azulgrana —séptimo en la tabla, con 4 victorias, 2 derrotas y 5 empates—. El equipo de Joaquín Caparrós lleva 17 puntos y está a solo dos puntos de puestos europeos.
En esa gesta mucho tiene que ver el portero costarricense, al que el secretario técnico Manolo Salvador quiere ofrecer la renovación y una mejora de sueldo, tal como apuntaba ayer Ràdio 9. Su última intervención «milagrosa» tuvo lugar el pasado jueves, contra el Betis, cuando paró hasta en dos ocasiones sendos lanzamientos de penalti del delantero bético Jorge Molina, tras hacer repetir el árbitro el primer disparo.
Antes de que se iniciase esta jornada 12, era el portero con más paradas de la Liga con 52, por delante de Esteban Suárez, del Almería, y de Miguel Ángel Moyá, del Getafe, ambos con 48. Para Navas, una figura clave en su eclosión esta temporada es Lluís Llopis, el preparador de porteros que trabaja con el técnico Joaquín Caparrós, y a cuyos entrenamientos hace responsable de su gran momento de forma, tal como recogía ayer la agencia EFE. Navas, que cumple su tercera temporada en el club de Orriols, pudo beneficiarse del descenso a Segunda B del Albacete, que lo cedió al Levante y pese a que sólo jugó seis partidos, cinco de Copa del Rey y uno de la Liga, un año después el club valenciano lo compró en propiedad por unos 200.000 euros y le hizo un contrato de cuatro campañas.
La pasada temporada aunque siguió a la sombra del guardameta uruguayo Gustavo Munúa, ya empezó a brillar. Fue el portero del equipo en el brillante estreno europeo del club, también en la Copa del Rey y, de hecho, se hizo con la titularidad en la Liga en el tramo final de la competición. Su crecimiento en el Levante ha ido en paralelo a los éxitos logrados con su selección. Joaquín Caparrós destacaba las virtudes de su guardameta tras el empate a cero contra el Betis. «Una vez más ha estado fenomenal, sobre todo en dos intervenciones» en alusión al penalti lanzado dos veces. «Es un chico que tiene una proyección tremenda, que cada día va creciendo y que va a ir a un Mundial. No sé qué puntuación ponerle, eso os toca a vosotros (periodistas)», manifestaba el técnico andaluz.
El jugador, con la sencillez que le caracteriza trataba de quitar importancia al logro contra el Betis. «Hay que tener humildad, porque falta mucha liga y hay muchas cosas por lograr», manifestaba. Además, no desperdiciaba la ocasión para «agradecer el trabajo de Llopis, que me ayuda a mejorar todos los dias». Respecto a qué sintió a la hora de tener que volver a parar un segundo penalti, confesaba: «Me quedé tranquilo y me esperé a que llegara el próximo».
Casillas y Valdez, referentes
De sus ídolos bajo palos fue sincero. «Trato de aprender de todos para ser mas completo porque en España hay porteros de muy buena calidad. Valdez, Diego López, Casillas, que tienen mucha experiencia», expresaba, el costarricense, que se siente «un privilegiado por estar acá». «Si quiero aprender aquí tengo de sobra», señalaba. Para Navas, esta era la primera ocasión —como profesional— en la que paraba dos penaltis seguidos.
