El Villarreal también sabe ganar sufriendo. Los amarillos tuvieron la paciencia necesaria para no desesperarse y buscar continuamente el gol, pero de forma controlada. Los amarillos demostraron de nuevo firmeza en defensa, dominaron claramente el juego, tuvieron las ocasiones más claras y finalmente llegó el gol en el último minuto. El autor Uche, siempre cuestionado, fue junto a Trigueros el mejor del partido. Los dos cambios por los que apostó Marcelino con respecto al último partido acabaron siendo definitivos. Siempre que el técnico asturiano ha buscado un juego más de contención, ha apostado por Pina. Con el joven toledano junto al de Artana el Villarreal es más vertical y busca constantemente la portería. como se demostró ayer. Pese a ser dos equipos recién ascendidos, estaba claro que era el submarino el que asumía el rol de grande en este encuentro.

El dominio fue amarillo. El Elche le esperaba atrás con las líneas juntas, esperando sus opciones a la contra teniendo como única referencia a Manu del Moral. Un sistema de juego que dominan a la perfección y que estuvo a punto de dar un buen susto al Villarreal, sobre todo a los centrales.

Papeleta más que resuelta la de Gabriel en su debut de amarillo. El brasileño no reflejó inseguridad en el campo. Se mostró atento anticipándose a las jugadas, incluso salvó una clara ocasión a la contra de Aarón segundos antes del descanso que a punto estuvo incluso de lesionarle. El que sí tuvo que ser sustituido apenas empezar la segunda parte fue Giovani Dos Santos, que se perderá el próximo encuentro ante el Atlético.

El encuentro comenzó bien diferente al mismo que hace un año se vivió en el mismo escenario pero con los dos equipos en Segunda División, aunque muchos de sus protagonistas permanecían en el campo.

La primera la tuvo Hernán Pérez, con un disparo que se marchó fuera. Fue por la banda del paraguayo por donde se creó más peligro, ya que a Cani le pesan algo más las piernas.

El peligro ilicitano siempre llegaba con centros al área que encontraban a Manu del Moral, una pesadilla para la defensa amarilla.

Segunda parte abierta

Fue en la segunda parte cuando el partido se abrió más. El Elche empezó a buscar algo más la portería de Asenjo y a dejar más espacios, lo que aprovechó al Villarreal. Marcelino decidió dar aire al equipo con Pereira, Pina y Aquino. Fue a partir de entonces cuando el Villarreal empezó a asediar la portería de Manu Herrera, y fue la actuación estelar del guardameta el que impidió mover el marcador. El gol no llegaba pero la paciencia tuvo premio y al final un centro de Hernán Pérez, acaba en pies de Pereira que intenta chutar pero su disparo marrado se convierte en un pase perfecto a Uche que bate al meta a falta de un minuto para el final. Tres puntos vitales de cara al duelo ante el Atlético de Madrid.