El equipo Playas Sagunt, que milita en segunda regional, ha recibido una sanción leve por el incidente protagonizado el pasado domingo en su campo por un aficionado, que lanzó al árbitro un fruto duro y provocó con ello la suspensión del partido contra el Andiamo Vila-Real cuando ya estaba a punto de terminar.

Mientras el juzgado aún debe pronunciarse sobre la denuncia presentada por el colegiado contra otro espectador por insultos y por unas amenazas que el implicado niega, el comité de la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana ha resuelto multar al club con 27,05 euros por lo que ha considerado como «un incidente leve desde el público», de acuerdo con el artículo 352 del reglamento general de la Federación.

El delegado de campo y el capitán del equipo de Sagunt también han sido sancionados con un partido cada uno «por un menosprecio al árbitro», amparándose en el artículo 357 b. De este modo, atendían al acta del partido redactada por el colegiado, donde éste criticaba los modos con los que se dirigieron a él después de que suspendiera el encuentro.