El Consell, a través el Instituto Valenciano de Finanzas, vuelve a ser el avalista del máximo accionista del Valencia CF, la Fundació. El aval sobre el préstamo supone añadir a las ya grandes deudas de la Generalitat otros 81 millones de euros, a los que se tendrán que sumar también los intereses. La situación se produce después de que esta mañana el Tribunal Superior de Justicia haya estimado el recurso presentado por Bankia, tras la sentencia que anulaba el aval del IVF a la Fundació.

La entidad presidida por Jose Ignacio Goirigolzarri consideró en su momento que el proceso estaba invalidado al no haberse permitido a la entidad participar en él, siendo un afectado directo, y decidió recurrir la sentencia. Hoy, la sala de lo Contencioso del TSJ le ha dado la razón, declarando nulo el procedimiento atendiendo a esta petición y, sin resolver sobre el fondo de la disputa, ordena repetir el juicio, teniendo en cuenta a Bankia. Como consecuencia de la decisión, fuentes del TSJCV han concretado que "el aval de la Generalitat a Bankia vuelve a cobrar validez". El auto es firme y contra éste no cabe recurso.

El Instituto Valenciano de Finanzas concedió en 2009 un préstamo de 74 millones de euros -que después se ampliaría a 81 millones- para que la Fundació del VCF pudiera adquirir la mayoría accionarial del club de fútbol, después de una polémica ampliación de capital. El Gobierno Valenciano, fruto de este aval, tuvo que afrontar el pasado mes de febrero el pago de 4,8 millones en concepto de intereses del préstamo a los que la Fundació VCF no pudo hacer frente.

El vicepresidente del Consell, José Císcar, que se encontraba en rueda de prensa cuando se ha dado a conocer el fallo, ha preferido no valorar la sentencia "hasta que no tengamos constancia de primera mano y la haya leído". Insistido por los periodistas presentes, sí ha aclarado que, en comparación con el caso del cierre de RTVV, "la Generalitat nunca se ha planteado vender el Valencia CF. Y nunca se lo planteará". A este respecto, el portavoz del Gobierno valenciano ha matizado que "no somos los propietarios, el Valencia CF no es una empresa pública". "Hoy no concederíamos este tipo de avales", ha reconocido.