Pese a los problemas que apuran al Valencia, su presidente está convencido de que podrá solucionarlos. Confía mucho en el rediseño del nuevo Mestalla para atraer a los inversores necesarios y la sentencia que devuelve el aval a la Generalitat Valenciana también provoca su optimismo. Son las dos noticias de la semana pasada, y con el parón liguero, hasta queda lejos la destitución de Braulio Vázquez. La primera pregunta le hace sonreír.

¿El Valencia está a salvo?

El Valencia está en una situación complicada. A nivel financiero parecida a la del mes de junio, pero se está trabajando en dotar al club de una estructura, deportiva, económica, comercial y de organización diferente a la que existía. Estará a salvo cuando haya frutos a todos los niveles, tanto en el plano económico como en el deportivo. Entonces empezará a cambiar el rumbo.

A nivel económico, después de lo que ha pasado con RTVV, y con el aval en la Generalitat ¿hay algún problema?

Con el aval, Bankia tiene intención de refinanciar. Durante los tres primeros años, lo pactado es el pago de intereses, mientras del cuarto al dieciocho, amortización de capital más intereses. Durante esos tres primeros años, la Fundación tendría suficientes fondos para pagar el préstamo, por lo que la Generalitat no tendría que desembolsar ningún fondo para financiar al Valencia.

¿Bankia no pedirá la ejecución del aval?

No.

¿Está acordado?

Está acordado. Con el aval hay refinanciación para la Fundación y hay un plan para pagar los tres primeros años de intereses. Uno de los temas que se ha trabajado en nuestros viajes es la financiación de la Academia GloVal y temas de la Fundación.

Cuando Salvo y su equipo llegaron al Valencia dijeron que tenían claras las soluciones para el club. ¿Qué problemas han surgido para que se retrasen?

Nunca hemos dicho que tuviéramos la solución para refinanciar. Para eso necesitamos el aval, que es lo que nos exige Bankia.

¿Lo comparte?

Imaginemos que el Valencia tuviera 285 millones de deuda con Bankia. El Valencia estaría refinanciado porque tiene el suficiente patrimonio para poder avalar una deuda de 280 millones.

Siempre que el banco acepte.

Si Bankia refinancia 200 millones de euros, no tendría problema en refinanciar 285 millones. Esa es mi opinión y la del Consejo. Lo que pasa es que son dos entidades jurídicas diferentes, una sin patrimonio y otra con patrimonio, pero pongo el caso hipotético de que fuera todo Valencia.

Está claro, pero ¿y la asistencia financiera?

Hemos dotado a la Fundación del suficiente contenido y actividad para poder ingresar, como mínimo, 3,5 millones sin que el Valencia tenga una descapitalización. Es decir, si no se cumplen los objetivos que se marcan en el convenio Fundación-Valencia durante el periodo de tres o cuatro años para la formación de futbolistas, ese dinero debería ser retornado. Existen unas garantías para los accionistas. El coste de formación tiene un precio de mercado. Los informes jurídicos que tenemos de tres bufetes diferentes nos dicen que no existe asistencia financiera porque es un precio de mercado y porque es una actividad habitual de la fundación y porque sin haber obligación, existe una garantía de retorno en caso que los objetivos no sean cumplidos.

¿Qué le parece que se reactive una denuncia sobre la ampliación de capital del club?

Una inestabilidad social muy grande. Todo el mundo tenemos derecho para reclamar lo que sea justo y que sea conforme a ley. Cuanto vas fuera te das cuenta que el Valencia es mucho más grande de la percepción que tenemos cuando estamos aquí dentro. Hay gente que lo ve como algo atractivo y todos estas cosas no ayudan. Sé que todos queremos lo mejor para el Valencia, pero cada uno lo ve desde un prisma diferente, pero hay alguien que pretende que se venda el club, pero con ese tipo de demanda será difícil vender el club. Es la pescadilla que se muerde la cola.

¿Hay financiación para terminar el proyecto del estadio abaratado por Fenwick?

Hoy no. Hay conversaciones con grupos que pueden estar interesados en la financiación del estadio. Fue pública la reunión que tuvimos con Wanda, con el presidente Wang. Es la empresa número uno de China, y en breve puede que vengan sus expertos inmobiliarios.

Hablamos siempre de interés de capital chino o árabe, ¿no?

Sí. No hay nada cerrado, pero hay posibilidades.

¿A cambio de qué?

Hay más gente interesada. KPMG está trabajando, y hay cuatro o cinco empresas…, dos o tres son serias. Para que esto se haga estamos en fase de recibir una propuesta de empresas que se dedican a la explotación de estadios de fútbol y de eventos en recintos deportivos. Una vez tengamos esas propuestas que calculamos que lleguen en tres o cuatro semanas, con ellas el posible inversor ya tendrá la seguridad de que alguien con experiencia, capital y solvencia va a explotar el Nuevo Mestalla, con garantía de retorno. No solo la garantía hipotecaria del estadio, sino la garantía de una empresa que va a generar una serie de recursos para el Valencia que va a ser la guía de pago del nuevo estadio.

¿Qué ingresos?

La explotación de los palcos «vip», todo el tema de «hospitallity», catering y puntos de venta.

¿El inversor puede modificar el proyecto?

Podría modificarlo.

¿O sea que el rediseño de Fenwick no está cerrado?

Es un diseño para poder enseñar. Hemos hecho los números en torno a 95/100 millones porque tenemos una idea aproximada de lo que puede generar la explotación de un estadio de este tipo, para que podamos con esos ingresos pagar la financiación del estadio y también amortizar deuda bancaria.

A esos cien millones se tendrían que añadir los 15 millones de la UTE que levantó el esqueleto, más los 45 que se le deben al ayuntamiento.

No había una previsión de pago al ayuntamiento, estaba en el limbo. La deuda que falta pagar al consistorio es alrededor de 18 millones y se está estableciendo un calendario de pagos dentro de lo máximo que nos pueda permitir la administración pública. Era una deuda que no estaba negociada.

¿El ayuntamiento conocía el nuevo proyecto?

No, era una reducción de costes y cuando tengamos el tema cerrado sí que nos sentaremos con ellos.

¿Y la polémica de los aparcamientos?

Los aparcamientos estarán porqué así lo dice el ordenamiento de la zona. Están hechos en bruto y lo que vamos a hacer es que en función de las necesidades que haya, o de las empresas que hagan gestión de los aparcamientos, se irán terminando. De todas formas, en días de partido no será posible usar el aparcamiento, porque la evacuación tal como está hecha por las dos calles que hay es inviable. Evacuar más de 3.000 coches es casi seis horas. Los aparcamientos se harán con una planificación y unas ventas. No los haremos para tenerlos vacíos.

¿Se atreve a dar alguna fecha para acabar el estadio?

Es muy difícil.

La que le gustaría...

En tres temporadas. Ésta y dos más. Imaginemos que llega un inversor rápido, estudia los números del club, se presenta la modificación de proyecto al ayuntamiento, se aprueba la modificación —que eso será rápido—, y se llega a un acuerdo con la UTE. El tiempo estimado es de dieciocho meses, pero las obras casi nunca se acaban a tiempo. Que sean veinte meses, al final nos vamos a tres temporadas. Eso es lo que me gustaría.

Cuando ha ido fuera en busca de inversores, ¿no se interesan sobre la incógnita de la propiedad del club?

Eso descoloca a los inversores, no lo entienden. Si ya es difícil para los que somos de aquí… Pero al final ellos se quedan con la deuda y saben que la deuda de la Fundación va unida a la del Valencia.

¿Alguien le ha propuesto comprar el club?

Nosotros solo hemos ido buscando temas del estadio, que nos va a ayudar a financiar al club y a la Fundación como tenedor del patrimonio del Valencia. Calculamos que una facturación de un museo en condiciones en el nuevo estadio estará por tres o cuatro millones.

¿Nadie le ha preguntado por el precio total del club?

Pues no…

¿Y si alguien le pregunta?

Yo por menos de 240 millones no lo vendería. Encontrar gente que ponga 80, 60… Ha habido oferta de 49 por la quita de las acciones… Encontrar empresas que pongan 80 millones es más fácil que alguien que ponga 240. Si compran el Valencia por 90 millones tienes una deuda bancaria de 225 millones, pero adquieres un patrimonio. El Valencia es el cuarto club de Europa con más patrimonio. Adquieren un patrimonio valorado casi en 500 millones, sin contar los futbolistas. Jamás vendería algo que vale 500 por 80, aunque asuman los 200 de deuda. Otra cosa es que alguien venga y diga quiero comprar el Valencia y ponga los 90 que debe la Fundación; los 100 que faltan para el campo; 40, 50 ó 60 para futbolistas y encima asuma la deuda. Alguien que se vea que no viene solo a refinanciación y ya veremos… con el riesgo del traspaso rápido de club o concurso de acreedores.

¿Existe ese alguien?

Hay muchísimas empresas así en el mundo. Otra cosa es que quieran invertir en un club de fútbol. Pero vender 95 años de historia, que la hemos hecho entre millones de valencianistas que han pasado por Mestalla... Venderlo por 80 millones sería muy duro.

¿Por qué el valencianista no compra acciones?

Porque no vale para nada. Voy a poner un ejemplo. El Barcelona en la temporada 2001, tenía 17 millones más de presupuesto que nosotros. Ganamos la Liga y teníamos 70 millones de deuda. El Barcelona, casi 300. Tuvimos tres años más extraordinarios, la ciudad crecía a pasos vertiginosos y el Valencia comenzó su rampa de descenso.

Por una mala gestión.

Evidente, pero perdimos una oportunidad histórica para hacer del Valencia uno de los doce equipos grandes de Europa. Pese a hacerse las cosas mal, he detectado que el prestigio del Valencia está intacto y se puede crecer.

Pero en esa época el Valencia era uno de los mejores equipos del mundo porque tenía una buena plantilla.

Y una buena planificación deportiva…

…Y un buen entrenador.

Un excelente entrenador.

Ahora mismo no hay un planificador deportivo.

Cierto.

¿Cuándo estará?

A final de mes.

¿Cuándo decide prescindir de Braulio Vázquez?

Cuando llegas al Valencia te das cuenta de que hay muchísimas cosas que tienes que cambiar. Unas las reorganizas de forma inmediata, pero ves una plantilla con el 98 por ciento hecha y sin poder comprar más. Esperando si al final venía una oferta por Soldado o no, había poco que planificar. Djukic ya había llegado, un entrenador que llegó en medio de la unanimidad del valencianismo, y empiezas por otras áreas.

¿Cuáles?

La Academia, que me preocupaba mucho porque es para cuatro o cinco años. El Mestalla, la pretemporada… Y empiezas a dar prioridad a los temas.

¿Cuándo pierde la confianza en Braulio?

Sabía que el Valencia necesitaba otro tipo de planificación deportiva porque la parte donde menos estructura tenemos es donde nos jugamos todo, la deportiva. Dependemos de dos personas. El club no depende de dos personas en ningún área ya. En la Academia hay una estructura, un manager general, un departamento de metodología, psicología, estadística médica y nutrición. Se tenía pensado hacerlo con tranquilidad pero al final hay que hacerlo.

¿No podía esperar a volver de su gira para decírselo personalmente?

Acepto todas la opiniones. Podíamos haber esperado una semana. Pero hay cosas que no se pueden decir. Cuando uno toma esas decisiones es porque algo pasa, no es por capricho. También hay que empezar a tener una cosa clara en el Valencia, si queremos que las cosas vayan cambiando. Hay una estructura profesional, un director general, un director de comunicación, un director comercial y marketing, un manager de la Academia, habrá un manager general deportivo… El presidente de una compañía como el Valencia CF no está para despedir a la gente. Hay una decisión del Consejo de Administración y el director general debe ejecutarla.

¿Se decidió en el consejo la destitución de Braulio?

Se había decidido en el consejo.

¡Si estaba en Asia!

Asisto a consejos de administración de mi empresa donde hay gente fuera de España. Hay videoconferencia, tecnología… muchas cosas. Lo que deseo con esto es que no haya nadie imprescindible en el Valencia y menos el presidente. Al final el Valencia debe ser una empresa superprofesional.

¿Quién va a fichar ahora?

El nuevo responsable de esa estructura.

Rufete, supongo.

Todavía no se sabe. Lo que queremos es a otro nivel y con otra dotación. Algo parecido a lo que se ha hecho en la Academia. Un responsable y diferentes áreas que complementen a una plantilla y un entrenador.

Toda esa estructura profesional del club, ¿cuesta más que el sueldo del anterior presidente?

Toda la estructura…, por supuesto. El departamento de marketing ha crecido en siete personas.

¿Hará públicos los salarios de los directores de área en la junta de accionistas?

No tengo ningún problema, pero lo tendrán que decir los abogados y lo que marque la ley de protección de datos. Otra cosa es que no lo diga allí y le diga venga al club, y mírelo.