Un grupo de accionistas del Valencia, liderados por el incombustible abogado Andrés Sanchis, han presentado una demanda por la vía contencioso-administrativa que pide la liquidación y disolución de la Fundación del Valencia. No reclaman su desaparición. Pero sí que venda sus acciones respondiendo, de paso, al espíritu democrático que en su día reclamó Savia Nueva para poder hacer frente a sus deudas.

El despacho jurídico Sanchis Nebot, el mismo que demandó a los responsables de la ampliación de capital por un supuesto delito societario causa que ha sido reabierta por el juez por orden de la Audiencia Provincial de valencia, solicitó ante el protectorado de Fundaciones que adoptara «de oficio» el acuerdo de disolver y liquidar el patronato. Al reclamar sus cuentas, le fueron facilitadas las de la temporada 2011-12, en la que aparecía un déficit de 14 millones de euros. «Tras su detallado análisis, se concluye que la causa de disolución y apertura de liquidación se basa primordialmente en que su fin social, se aleja por completo del carácter mercantil que hoy, y tras la compra del accionariado del Valencia CF, asume la Fundación. Lo que provoca un alarmante desfase económico, que le resultará de todo punto inviable atender», explica el despacho de abogados.