Maradona quiso sumarse a las felicitaciones navideñas y desear lo mejor para el 2014 a todos sus seguidores, más conocidos como 'maradonianos'. Tampoco se olvidó de sus familiares, a los que agradeció estar a su lado tanto en los momentos buenos como en los malos.

Pero no todo iban a ser buenos propósitos. Haciendo gala de su particular personalidad, el astro argentino mandó un regalo envenado a todos los que le critican.

Sin ningún tipo de pudor, se levanta la camiseta de la selección argentina y muestra su abdomen ante las cámaras. De esta forma, presume de físico y desmiente a los que le acusaban de usar 'Photoshop' en sus imágenes.

Pero todavía tenía algo reservado. No encontró mejor forma de despedirse que con su famosa frase "que la chupen". Un genio y figura; odiado por muchos, querido por otros.