Si la semana pasada se acabó en el Bernabéu con la racha de ocho partidos sin conocer la derrota, ayer también se rompió otra, la de los encuentros en casa sumando puntos. El equipo azulgrana no perdía ante su público desde el 24 de noviembre, cuando lo hizo por cero goles a tres contra el Villarreal. Ayer, casi cuatro meses después, caía por la mínima contra un Celta que fue muy superior en el primer tiempo, pero no en el segundo.

En el día en que Las Fallas vivían su día con mayor protagonismo de los niños debido a que todas los monumentos infantiles ya estaban plantados, el Levante también rindió su peculiar homenaje a los más pequeños. Así, los colegios Juan XXIII de Burjassot y el Vicente Gaos de Valencia disfrutaron del partido y se hicieron una foto conjunta en el centro del campo. Lástima que no vieron un triunfo del equipo azulgrana.

A falta de once jornadas para el fin de la temporada, el Levante perdió ayer las remotas opciones que tenía para entrar en Europa después de esta derrota inesperada. Además se le da alas a un rival directo por la permanencia como es el Celta. Aunque la verdad es que ni uno ni otro deberían de pasar apuros de cara a mantener la categoría.

El locutor del Ciutat de València tuvo el detalle de dar la bienvenida al Celta de Vigo en gallego. Sin duda, un detalle que agradecieron los pocos aficionados que se habían desplazado desde tan lejanas tierras. Disfrutaron del triunfo y seguro que más de uno también de la fiesta que se vive en toda la ciudad.

El palco del Ciutat de Valencia contaba ayer con la presencia del seleccionador de Austria, Marcel Koller. No vino a la ciudad a ver las Fallas, al menos no solo a eso, sino a seguir las evoluciones de un Ivanschitz en quien confía cada vez más.

Conscientes de la importancia de este partido y de las complicadas fechas en las que llegaba, el club decidió que cada abonado pudiera invitar auna persona. La iniciativa tuvo éxito porque la grada registró una buena entrada de 14.252 espectadores.