»Gloria, gloria, Aleluya», cantaban Los Inhumanos en el exterior de Mestalla y tatareaban los aficionados minutos antes de entrar al campo. Una letra que debió escuchar en el vestuario Javi Fuego y, con su dos goles, quiso personalizar. Y es que, será difícil que Javi Fuego olvide el derbi contra el Villarreal. El jugador, un trabajador del fútbol como a él le gusta definirse, se llevó todos los aplausos de Mestalla y la admiración de una afición que se resiste a dejar de pensar que acabar entre los siete primeros de la liga es un imposible. La ilusión, dicen, es lo último que debe perderse. La victoria, sobre todo por la rivalidad que existe con el Villarreal, dejó un sabor dulce. La de ayer fue una tarde redonda que arrancó con un divertido espectáculo en la Fan Zone y acabó con la satisfacción de sumar tres puntos. Y es que los partidos de Liga contra el Villarreal no tienen mucho poso, ya que el primero data de la temporada 1998.99 pero sí han crecido a tal ritmo que parece que lleven décadas disputándose. Se trata de un derbi autonómico muy parejo. La rivalidad es máxima. Son dos equipos que se tienen ganas. Ayer, aupado por la grada, el Valencia buscaba revancha por la humillación sufrida en la primera vuelta en El Madrigal. Y sobre todo, mantener la ilusión por acabar en puestos europeos. Quizás por ello, el fondo sur recordó a los jugadores cuando salieron al campo que detrás de ellos hay mucho sentimiento detrás. En una enorme pancarta se podía leer: «95 anys d'historia ,de fidelitat a uns colors i llealtat a uns valors». Y el Valencia de Pizzi respondió

A pasar la tarde a Mestalla

La propuesta del Valencia es que a Mestalla no se va sólo al fútbol sino a pasar, en este caso, la tarde. Y así fue. Desde dos horas antes del encuentro, centenares de aficionados disfrutaron y participaron de las actividades de la Fan Zone. El espacio, situado detrás del fondo norte, fue todo un éxito en el que se lo pasaron pipa pequeños y grandes. Y es que, si los niños participaron en actividades como colorear la mascota, o jugar en un minicampo hinchable o un circuito de chutagol, los jóvenes y adultos recordaron épocas pasadas tarareando canciones de Los Inhumanos y fotografiándose con los trofeos conseguidos por el club. El grupo valenciano actuó, con música en directo, durante unos tres cuartos de hora para interpretar las canciones más conocidas de su amplia discografía. Los hombres vestidos de monjes fueron los encargados de poner música al derbi y de unir a dos aficiones que cantaron juntas letras como «Gloria, Gloria, Aleluya» o «Tu eres una foca».

El concierto, y las actividades, sirvieron para que Amadeo Salvo se diera todo un baño de autoestima ya que fueron muchos los aficionados que vitorearon al presidente y le dieron ánimos y felicitaciones por su gestión al frente del club. Así se desprendía de los elogios que acumulaba, Salvo tiene carisma y se ha ganado el crédito de una afición que empieza a estar harta del largo y embarullado proceso de venta en el que está inmerso el club. La afición lo que quiere, así se lo repitieron una y mil veces a salvo, es sentirse orgullosa del equipo y con Pizzi ese sentimiento existe. La alegría con la afición salía del campo así lo reflejaba.