«¿Se ha batido el récord?» Preguntaba un atleta del gran pelotón de la hora y media, más preocupado por lo sucedido en cabeza que por su propio esfuerzo. Se le dijo que sí y soltó un «¡Bien!» como si fuera un primo tercero de Abraham Cheroben, cuarto clasificado el año pasado.

Es un demostración de hasta qué punto la comunidad de corredores populares interioriza a sus héroes y se alegra por sus éxitos. Y ayer hubo motivos más que de sobra para celebrar. Valencia pasa a ser una de las ciudades más rápidas del mundo después de que el atleta keniano parara el crono en el Medio Maratón Valencia Trinidad Alfonso en 58 minutos y 49 segundos. Le dio una mordida de medio minuto a la mejor marca jamás hecha en territorio español —en el medio maratón de Granollers, la “carrera maldita”, que se resistía a ceder su primacía—.

Pero incluso ese registro palideció ante otros dos: es la mejor marca mundial del año, y es la sexta mejor marca mundial de todos los tiempos. Y con dos segundos menos, habría sido la cuarta mejor de todos los tiempos. Un acontecimiento que pone a la ciudad en la vanguardia mundial del atletismo de correr, el de participación, el gran evento no pretencioso y el que disfrutan todos.

La locura de Kisorio

La de ayer fue una carrera épica, que pasará a la historia. El duelo entre kenianos se convirtió en una auténtica locura cuando tres de ellos se marcharon hacia lo desconocido merced al brutal tirón de Mattew Kisorio, que sólo pudieron resistir el futuro ganador y Kennet Kipkemoi. Un sacrificio de talla mundial.

Estos dos se quedaron solos y aunque este último intentó achcuhar a Cheroben, haciendo la goma hasta la altura de la Ciudad de las Artes y las Ciencias acabó por ceder. A partir de ahí, el keniano corría contra sí mismo para batir su mejor marca y ponerse entre las mejores. La recta de Juan Verdeguer parecía hacerse eterna y la ilusión era enorme, porque ya el primer paso importante, el de los diez kilómetros, se había hecho con un tiempo brutal.

La grada se volvió loca con el «marcón». El récord que tenía Granollers lo batieron el primero y el segundo. Cuatro entraron por debajo de la hora y la ganadora femenina Emily Muge, vigente campeona del mundo de campo a través, también rebajó la mejor marca de la carrera valenciana.

«Es el mayor éxito de la historia del atletismo valenciano» aseguró feliz el director técnico de la carrera, Francisco Borao. «El paso por los 10 kilómetros era de récord de mundo. Es que ni las liebres que tenía uno de ellos han podido aguantar más de unos pocos kilómetros. Lo miremos por donde lo miremos, es un día histórico. Y si ayer, el mundo del atletismo popular estaba pendientede nosotros, hoy aún lo estará más. Valencia acaba de ponerse en la primera línea mundial de este deporte». Una carrera desbocada. «Los kenianos no tienen sentido de grupo o de nacionalidad porque van en grupos con distintos managers. Así que aquí es ver quien aguanta más. Se ha ido muy rápido y se ha aprovechado».

Cheroben, que corre mejor que habla, apenas pudo articular su satisfacción y su convencimiento de que «batiré el récord del mundo. Fue cuarto el año pasado y, con su juventud, se puede esperar cualquier cosa.

«Nos ha sobrado un poquito de humedad. Si no, hasta la mejor marca mundial del eritreo Zersenay Tadese (58.23) se habría tambaleado».

El festival keniano emocionó a los que deseaban que llegara algo así. Por detrás aparecieron los demás. Como Hassane Ahouchar, que hizo también un marcón y se dio el gusto de quedar por delante de una leyenda mundial como Patrick Makau. Después, los españoles y los de casa (como siempre, Luis Félix Martínez fue el más aplaudido). Y a partir de ahí, el gran desfile de populares hasta que entró María José Ayala, una atleta veterana de Serra que hizo la 9336.

Quizá el único lunar haya sido la participación: en la meta entraron apenas 58 atletas más que la pasada edición. Un total de 9336 contra los 9278 del pasado año. Pero este aparente techo podría sufrir un acelerón nuevamente en la próxima edición teniendo en cuenta que el reclamo de «una de las carreras más largas del mundo» (ganada sin atenuante de ningún tipo) dará nuevamente alas a los populares. Una noticia que también viene muy bien, a nivel de participación, de cara al Maratón Valencia Trinidad Alfonso del próximo mes.