Serhiy Lishchuk (Rivne, Ucrania, 33 años) no soñaba cuando fichó en la temporada 2009-10 por el Valencia Basket que su periplo fuera de su país iba a ser tan largo. Aventuraba un año o a lo sumo dos. Hace dos jornadas se convirtió en el segundo jugador extranjero con más partidos jugados con la camiseta «taronja» por detrás del mítico Bernard Hopkins además de ser, junto a Rafa Martínez, uno de los capitanes de la plantilla. La temporada no ha sido fácil para él. Una lesión en Bilbao el pasado mes de diciembre lo dejó fuera de las pistas más de dos meses. Con dos Eurocopas en su palmarés, Lishchuk es ambicioso en la que puede ser su última temporada en Valencia. El jugador ucraniano lanza un mensaje de cautela en una campaña que todavía aún no ha acabado y que promete emociones fuertes.
Que importante la victoria el domingo en Badalona. Se sufrió pero se ganó.
Desde luego. Ha sido muy importante para nosotros porque el Joventut ha estado por delante de nosotros durante toda la temporada y ahora hemos podido pasarles. Hay que aprovechar que estamos en una buena racha para poder mantenerlo el sábado contra Manresa. Será un partido con la misma trascendencia que el de Badalona, así que debemos concentrarnos bien para sacarlo adelante.
¿Qué cambió en el equipo para reaccionar en el último cuarto y remontar once puntos de desventaja?
Fue un partido complicado y muy intenso durante los cuarenta minutos . No sé muy bien lo que nos pasó en el tercer cuarto pero sí es verdad que se nos puso el partido muy cuesta arriba. Jugamos con paciencia y poco a poco fuimos creyendo que era posible. Nos ha dado mucha confianza porque ganar fuera es siempre difícil.
Y si este sábado se gana, se va a cerrar un mes de abril con pleno de victorias.
Esperemos que sea así. Tenemos ahora casi una semana para preparar los partidos y eso nos viene bien. Tenemos que seguir trabajando igual y sobre todo, estar muy concentrados para no desconectarnos de los partidos. Si lo hacemos seguiremos sumando victorias.
¿Es partidario del partido a partido, o se puede mirar más allá?
Solo podemos mirar al partido siguiente. Personalmente trato de no estar muy pendiente de lo que hacen el resto de equipos ni de mirar las opciones de futuro, o ver hasta donde podemos llegar. Lo que más me preocupa es lo que hacemos nosotros y ahora nuestro futuro inmediato es Manresa. No hay más.
Por fin están todos sanos. No hay lesiones. Ya era hora, ¿no?
Yo casi ni me acuerdo de la última vez que habíamos estamos en un partido todos juntos. Puede que hiciera tres años por lo menos (bromea). La verdad es que es increíble que por fin la semana pasada pudiéramos entrenar todos juntos. No hemos tenido suerte con las lesiones. Volvía uno y se lesionaba otro. Parecía que se recuperaba un compañero y otro recaía. Espero que de aquí al final de temporada lleguemos todos sanos y no tengamos más problemas de este tipo porque evidentemente el rendimiento será mucho mejor y los esfuerzos más repartidos entre todos.
¿Cómo se encuentra físicamente? Porque vaya partidazo el suyo en Badalona.
(Sonríe). Me estoy encontrando cada vez mejor pero no estoy todavía al cien por cien. Necesito coger más ritmo de partidos. Entreno muy bien pero me falta más competición. Es un detalle que parece pequeño pero que para los jugadores es muy importante. Como mejor evoluciono y mejoro es participando en los partidos y teniendo minutos y por supuesto continuidad.
Con lo que me dice, ¿no hemos visto todavía la mejor versión de Lishchuk?
Estoy convencido que aún puedo ofrecer cosas distintas y mejores al equipo. Si sigo trabajando así y me respetan la lesiones seguro que se verá un Lishchuk todavía mejor. No tengo dudas.
