Nuevo parón a la racha positiva de resultados del Valencia Basket. Gran Canaria, superior durante los cuarenta minutos, superó con claridad al conjunto valenciano que tan solo ha podido mantener durante una jornada su defensa de la cuarta plaza. El acierto exterior de los canarios, con siete triples conseguidos en el último cuarto, unido al desconcierto atrás de los taronja, y a la falta de ideas en ataque, provocaron una derrota que sigue reabriendo las dudas generadas tras el partido de hace dos jornadas ante Manresa. Nuevo toque de atención a los de Carles Duran que ven como la clasificación por arriba se estrecha con solo tres partidos por disputar y donde se volvieron a encajar noventa puntos. Una norma, que empieza a tener visos de eterna y asumida. Demasiado riesgo.

Otro mal arranque de partido

El conjunto taronja volvió a salir frío al choque. Gran Canaria estuvo más intenso, y con las ideas más claras. Fruto de esto, en apenas tres minutos los locales situaron sus primeras ventajas en el marcador (10-0). Harangody, con ocho puntos en este primer cuarto, sostuvo al equipo que encajó de nuevo muchos puntos en diez minutos (24-17). Con un asentado Van Rossom en la dirección, Valencia Basket mejoró en el segundo cuarto y solo un par de triples anotados en la bocina por los locales les permitieron llegar con ventaja al descanso (46-43).

El tercer cuarto marcó el desenlace del partido y eso que fue justo el momento que los «taronja» se pusieron por delante por primera vez en el marcador (50-51). A partir de ahí, Salin volvió a dinamitar a los locales. Sin Van Rossom en pista, el equipo acusó la dirección de un Nedovic impreciso y desorientado con un Gran Canaria cada vez más lleno de confianza.

Festival de triples locales

Siete triples, la mayoría de ellos librados tras fintar al rival, impulsaron a los canarios a la victoria en el último cuarto. Ninguneado y bailado, el desajuste en los valencianos era tal que Vives se vio obligado a tomar decisiones que por su rol no debiera, o que Lishchuk tuviera incluso que lanzar un triple al no tener otro compañero con más galones una mejor opción de tiro . En un querer y no poder el conjunto insular superó incluso el basket average con los triples postreros de Kuric para devolver la sonrisa a Gran Canaria que ahogó así sus penas europeas.

Cuarta plaza perdida y margen de error a cero. La cuesta de mayo ha comenzado con mal pie. No hay tiempo para lamentaciones. Tres jornadas por delante para ganar. Sin excusas.