La española Carolina Marín se aseguró al menos la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de Bádminton, que se está disputando en Yakarta hasta este domingo, después de derrotar con brillantez y autoridad a la china Shixian Wang en dos mangas por 21-17 y 21-19.

Después de dos partidos duros, donde tuvo que jugar los tres sets, y con el susto en el segundo que le dio su pie, la actual campeona del mundo sacó a relucir su mejor versión en el cruce decisivo para volver a estar entre las cuatro mejores del mundo y tener ya, como mínimo, el premio del bronce.

La jugadora onubense dio un paso adelante en el momento adecuado y ante un rival de más nivel como Wang, séptima jugadora del mundo, pero que nada pudo hacer ante la española, que sigue creciendo en su juego y que llega a la penúltima ronda plena de confianza.

En el inicio del primer set, se mostró una gran táctica entre ambas jugadoras, que buscaban los límites de la pista con profundos 'lobs' para controlar los ataques y los puntos iban cayendo de un lado y otro sin que ninguna se escapase en el marcador.

Sin embargo, en esa tensión, Marín supo manejarse mejor y endosó un duro parcial de 11-3 a la asiática, que le sirvió para tomar una ventaja que supo gestionar para llevarse la primera manga por 21-17.

En el segundo set, según informó la Federación Española, se repitió la igualdad, pero la andaluza continuó muy firme y poco a poco fue abriendo brehca y plantándose con un 15-10, peligroso para la china, que entonces reaccionó y fue dominadora por primera vez en todo el partido.

Así, Wang le dio la vuelta al marcador y se puso al borde de forzar un tercero y definitivo parcial, pero Marín sacó sus galones de campeona del mundo para no permitir que la asiática sumase ningún punto más y hacerse con el billete a las semifinales donde se medirá a la ganadora del duelo entre la coreana Sung Ji Hyun y la india Sindhu, esta a la que derrotó el año pasado en Dinamarca para entrar en la final.