El FC Barcelona ha hecho oficial este mediodía el traspaso del delantero Pedro Rodríguez al Chelsea por 30 millones de euros, "de los cuales, tres millones son variables, según rendimiento", ha precisado el club azulgrana en un comunicado.

"El club quiere expresar públicamente el agradecimiento a Pedro Rodríguez por su profesionalidad y dedicación durante todas las temporadas que ha estado en el club, así como trasladarle los mejores deseos de cara al futuro", concluye la nota.

El punta canario viajó este miércoles a Londres para cerrar su fichaje por el conjunto que dirige Jose Mourinho, con el que ha firmado un contrato para las cuatro próximas temporadas.

Mientras, la plantilla azulgrana, tras dos días de descanso, ha regresado esta mañana al trabajo sin él.

Pedro hacía semanas que había pedido a la entidad azulgrana que escuchase ofertas, consciente de que Luis Enrique, pese a que había expresado pública y reiteradamente su deseo de seguir contando con él, no podía darle más minutos.

El tinerfeño se había convertido en el cuarto de una lista de delanteros encabezada por tres de los mejores jugadores ofensivos del mundo: el argentino Lionel Messi, el uruguayo Luis Suárez y el brasileño Neymar da Silva, lo que había convertido su papel en el equipo en residual desde la pasada campaña.

Parecía que el Manchester United sería su próximo destino y, de hecho, el pasado lunes Ed Woodward, vicepresidente deportivo de los diablos rojos, estuvo en la capital catalana para negociar el fichaje de Pedro, pero la oferta de 25 millones de euros fue considerada insuficiente por la entidad azulgrana.

El Barcelona, que hace semanas que tasó públicamente al punta canario en 30 millones -remitiéndose a su cláusula de rescisión-, tampoco estaba de acuerdo con las condiciones de pago aplazado que ofrecía el United.

La entrada de nuevo en escena del Chelsea y su predisposición a aceptar la demanda económica del Barça ha acabado por convencer también al delantero, que en Stamford Bridge se reencontrará con el exazulgrana Cesc Fàbregas y con compañeros de selección como Diego Costa y César Azpilicueta.

A sus 28 años, Pedro se marcha del Barça tras ocho temporadas y 320 partidos con la camiseta azulgrana, con la que ha marcado 99 goles y levantado una veintena de títulos (5 Ligas, 3 Ligas de Campeones, 3 Copas del Rey, 3 Supercopas de Europa, 2 Mundiales de Clubes y 4 Supercopas de España).

El tinerfeño se convirtió, desde que Pep Guardiola lo subió al primer equipo la temporada 2008-09, en una de las piezas claves del que ha estado considerado el mejor Barça de la historia.

Futbolista decisivo en aquellos primeros años del Barcelona de Pep, es el único jugador español que ha marcado en seis competiciones distintas en una temporada (2008-09) y ha sido capaz de ver puerta en seis finales durante su carrera como azulgrana.

La última de ellas fue hace una semana, en la Supercopa de Europa ante el Sevilla, donde hizo su último servicio al club anotando el gol del triunfo en la prórroga.