Después de escalar con dificultades hacia los cuartos de final, la selección española de baloncesto afronta hoy un reto mayúsculo ante Grecia en busca de una plaza de semifinalista del Eurobasket. O lo que es lo mismo: tener una plaza en el preolímpico para los Juegos de Río. Enfrente hay un rival «enorme», plagado de virtudes. Nada menos que una Grecia hambrienta de títulos, que llega invicta a la cita bajo el mando de Vassilis Spanoulis. Además, tiene ganas de saldar viejas deudas pendientes con España. Altura, velocidad, tiro y defensa. Esos son sus grandes valores. El partido servirá para el reencuentro entre Víctor Claver, que hasta ahora ha tenido poco protagonismo, y el extécnico del Valencia Basket, Fotis Katsikaris, ahora a los mandos de la selección helena.

El baloncesto español se aferra a la figura de Pau Gasol, el resorte de la selección hasta ahora. Erigido en máximo anotador (23 puntos por partido) y máximo taponador de la competición (2.2), Gasol se superó a sí mismo en los octavos de final, destapándose como un «francotirador» letal (6/7 triples) y poniendo la guinda que le confirma como el mejor jugador del Eurobasket hasta la fecha y el líder indiscutible al que se aferra a España para buscar su quinta semifinal europea consecutiva.

Durante este trayecto, los jugadores, sin ocultar el objetivo final de conseguir la clasificación directa para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, no han hecho apología de sus ganas, de sus deseos y de sus intenciones. Pero ha llegado el momento y con sus fuerzas, mayores o menores, van a apurar todas sus opciones.

La defensa está siendo el caballo de batalla de un equipo que conoce sus limitaciones y que necesita restar brillo al rival para igualar el potencial en la pista.

En ataque, España presenta, un poco por sorpresa, los mejores números de todos los cuartofinalistas, pero es en defensa donde está su mayor margen de mejora y la mejor opción de intentar ganar.

Sin embargo, España deberá superar varios obstáculos para imponerse en el Pierre Mauroy Stadium de Lille, empezando por los problemas físicos que afectan, entre otros al propio, Gasol. "Están un poco mejor todos, pero no quiero ir más allá. Esperemos que pueden estar en condiciones, aunque no estén al máximo ninguno, de jugar", ha avanzado Scariolo sobre el pívot de Chicago Bulls, Pau Ribas y Rudy Fernández.

Este último es el que más preocupa por culpa de sus persistentes dolores de espalda que ya le impidieron disputar el último duelo ante Polonia. Víctor Claver, prácticamente desapercibido durante la primera fase, disputó 25 minutos en octavos de final, colaborando con 5 puntos y 6 rebotes.

Grecia, que presenta la segunda mejor defensa del torneo, ha batido sucesivamente a Macedonia, Croacia, Georgia, Eslovenia, Holanda y Bélgica, un periplo inmaculado que demuestra la calidad de su equipo.