David Ferrer, el octavo favorito, ha conseguido su pase sin problemas a los octavos de final del Masters 1000 de París, con una victoria ante el ucraniano Alexandr Dolgopolov, por 6-2 y 6-2.

En tan solo 60 minutos, Ferrer liquidó su primer escollo este año en Bercy, un torneo que ganó en 2012 y del que fue finalista en 2013.

El jugador valenciano, reciente ganador en Viena, se enfrentará ahora contra el ganador del encuentro entre el búlgaro Grigor Dimitrov y el croata Marin Cilic