Los integrantes de la plantilla y el cuerpo técnico del Huracán hicieron ayer una colecta para pagar el arbitraje del encuentro que disputaron contra el Reus Deportiu. El Huracán recibió al líder de su grupo en un partido que acabó con victoria visitante por 1-2 y que estuvo marcado por la grave crisis económica que atraviesa el club.

El cuerpo técnico y la plantilla juntaron mil euros, que junto a los cuatrocientos de taquilla fueron destinados a abonar el arbitraje. Asimismo, los jugadores saltaron al césped con una pancarta en la que se reclamaba una solución inmediata a los problemas que atraviesan y en la que se leía «Directiva dimisión, solución ya». Tras el pitido inicial, durante treinta segundos permanecieron sin moverse como protesta.