Una vida sobre ruedas y a toda velocidad. El triunfo es la consecuencia de la disciplina, el esfuerzo y la dedicación. Sin esa mezcla, Borja Navarro entiende que plantearse metas es una utopía y por ello además agradece a todos los que trabajan en ocasiones en la sombra para que él pueda saborear los éxitos. Con la voz tranquila y sin ningún alarde, este deportista habla de sus títulos. «En 2015 he sido cinco veces campeón de España», explica. Casi sin querer llevarse ningún mérito. Sin alzar la voz y con la mirada puesta en nuevas metas, este joven de 18 años esconde un espíritu ambicioso y un talento innato en un deporte desconocido para la gran mayoría.
«Desde muy pequeño probé muchos deportes pero no me gustaban, no los disfrutaba. Cuando empecé a patinar noté que era lo mío. Me gusta patinar y me gusta la velocidad». Cuando ser jugador de fútbol o de baloncesto es el sueño de muchos niños, Borja no se divertía dándole patadas a un balón y cambió los tacos por las ruedas de los patines y se inició una andadura que está regalando éxitos al deporte valenciano y al español. A los 9 años descubrió de manera casual su deporte. «Empecé con 9 años en el patio de mi colegio. Mi hermano había empezado y me gustó. Con el paso del tiempo me fue llamando más y comencé en competiciones», explica.
Después de sus cinco títulos nacionales y dos finales europeas, Borja Navarro mira al futuro con optimismo y con la sensación de que puede seguir creciendo en todos los aspectos. Ambicioso y con un gen ganador excelente, su mirada va más allá de nuestras fronteras y apunta a un título en concreto. «Este año mis objetivos planteados con mi entrenador son revalidar títulos. Espero poder competir con la selección en el Europeo. Quiero alcanzar las medallas en las pruebas de velocidad. Quiero ganar el campeonato de Europa (en Holanda, del 23 al 30 de julio)», explica de manera tímida, aunque cuando se pone los patines su carácter es otro y en su mirada siempre está llegar el primero a meta.
Echando la vista atrás, también recuerda cómo han sido las últimas navidades y cómo ha vivido la espera hasta la gala, en la que fue condecorado con el Premio Talento Joven de la Comunidad Valenciana concedido por Levante-EMV. «Supe un mes antes que era finalista y ha sido un mes, desde el 20 de diciembre hasta el 19 de enero de muchos nervios. Me pasaba el tiempo pensando en si me lo podrían dar. Hice el vídeo para la presentación. Estaba muy nervioso y cuando dijeron mi nombre me costó hasta levantarme», aseguró. Además, compara ese instante con uno de sus favoritos. «Fue una sensación parecida a cuando dan una salida en patines, te cuesta reaccionar».
En el patinaje se descubre también otra de la esencia de este deporte. El compañerismo es la clave y Borja explica que sin esa filosofía ninguno podría lograr éxitos. «En los deportes minoritarios se tiene eso más en cuenta. Sabes que no vas a vivir de esto. Cuando ya no seas patinador te queda la gente que has conocido. Esto es una pequeña familia», afirma.
Esa «familia» es también la que permite que los triunfos se compartan entre todos, por ello Borja agradece a todos los que colaboran en cada triunfo. «Sin ellos no podría haber llegado donde estoy y no seguiré avanzando si no lo tengo. Al final la filosofía de este deporte es el compañerismo. Es un deporte individual pero a veces te toca ayudar en una carrera a alguien y otras te ayudarán a ti. En ese momento sabes que tu medalla es una parte tuya pero otra de tus compañeros. Yo he conseguido medallas porque otros compañeros me han ayudado, han tirado a la basura su carrera para ayudarme. Han sacrificado carreras para que yo consiga un punto. Incluso en un campeonato de Europa han podido tirar una carrera para que tú saques una medalla y ahí no la han tirado porque has conseguido un premio, esa persona también tiene algo que es tuyo», afirma el joven patinador.
Después del entrenamiento Borja aprovecha para descansar y prepararse la jornada del dia siguiente. En plena semana de exámenes „estudia Fisioterapia en la Universidad de Valencia„ las hojas de los apuntes y la pista de patinaje copan la agenda de uno de los mejores talentos del deporte nacional.
