Una semana después de la derrota en la Fonteta ante el Estudiantes, el Valencia Basket afronta contra el Obradoiro un partido en el que se examinará su capacidad de motivación ante un equipo al que esta no le puede faltar, pues están tan solo un triunfo por delante de los puestos de descenso, que ahora marca precisamente el verdugo de los taronja de la pasada semana.

La dura e inesperada derrota contra los estudiantiles provocó que los de Pedro Martínez perdieran el coliderato con el FC Barcelona. Es cierto que el fulgurante inicio de temporada les da margen de maniobra, pero no lo es menos que, como se vio en la Eurocup y también en la Copa del Rey, un pequeño error puede acabar con todas las ilusiones.

Partidos como los de hoy son claves para mantener la confianza del equipo y para evitar que el Real Madrid, ahora a dos victorias, se acerque más y haga peligrar incluso el segundo puesto de cara a la lucha final por el título.

Pero si los valencianos no pueden fallar, aún menos lo puede hacer su rival que tan sólo ha ganado uno de sus últimos 10 partidos, lo que le ha llevado a su delicada posición actual.

Cuatro jugadores tocados

El entrenador se llevó ayer a 12 jugadores, pero hasta cuatro de ellos llegan con diversas molestias. Un lastre que podría ser una de las principales complicaciones para este partido. Así, a la baja de Van Rossom, hay que añadir el proceso vírico de Jordi Trias, los problemas de tobillo de Romain Sato, las molestias en el gemelo de San Emeterio y los dolores en el tendón de aquiles que arrastra Bojan Dubljevic.

Hasta el momento, los datos son muy favorables para el Valencia BC, no en vano ha vencido en las últimas 7 ocasiones. Además, acumula un balance de 10 victorias y una sola derrota contra los gallegos, que se produjo en la temporada 2011-12 por 76-62.

Una de las pocas similitudes entre ambos equipos es que ninguno ha realizado incorporaciones desde el inicio de la Liga, lo que les ha llevado a mantener su bloque.

En el cuadro gallego habrá que poner atención en el máximo anotador de la Liga, Waczysnki, que promedia 15,5 por partido. También habrá que vigilar al mejor taponador, Pustovyi. Así como tener en cuenta el buen momento de forma del joven Santiago Yusta.