El Comité de Competición de la Federación valenciana de fútbol ha castigado con dos meses de sanción a dos jugadores del Juventud Barrio del Cristo por "amenazar" e "intentar agredir" al árbitro del partido que enfrentaba al Massanassa CF contra el equipo de Aldaia, del grupo II de la Regional Preferente.

El encuentro fue suspendido por el árbitro en el minuto 68, cuando después de expulsar al portero del Juventud se encerró en el vestuario al sentirse amenazado por algunos jugadores del equipo rojillo, que proestaban airadamente esa tarjeta roja. El árbitro se metió en la caseta mientras, según subraya en el acta, le lanzaban proclamas del tipo : "No vas a salir vivo de aquí". El trencilla solicitó la presencia de la policía local, pero después de que los agentes se personaran y no le aseguraran su seguridad si reanudaba el partido, se decantó finalmente por suspender el choque.

En este sentido, la Federación ha decidido que el partido debe reanudarse para jugar los 22 minutos restantes. Además, el Juventud deberá pagar los costes arbitrales. Asimismo, tendrá que abonar 150 euros y su estadio será clausurado un partido porque el acta arbitral señala que uno de los aficionados del club agredió a uno de los jueces de línea durante el duelo del domingo pasado. Para demostrarlo, se adjunta en el acta un parte médico.

El partido se suspendió con 0-1 a favor del Juventud, pero tras la expulsión de su portero y la de su capitán por protestar „sumadas a dos rojas mostradas anteriormente„, el Juventud deberá afrontar los 22 minutos que quedan con solo siete jugadores.