A lo grande. Así se estrenó el Valencia Basket en su competición fetiche. En medio de la vorágine que todavía envuelve al equipo con la llegada del pívot, el cuadro taronja regaló una victoria a su afición contundente y donde no dio ninguna opción a un Ulm que llegaba con números que aventiraban un duelo más igualado. Pedro Martínez aprovechó el choque para dar minutos a todos los jugadoresdonde además todos sumaron. Buen síntoma.

El partido comenzó con superioridad taronja que desde el primer minuto se fijó como objetivo frenar el poder anotador del conjunto alemán que llegaba con la vítola de promediar casi cien puntos por partido. De esta manera con un buen trabajo bajo los aros, donde Dubljevic y Oriola eran muy superiores a la réplica del Ratiopharm Ulm, los valencianos cobraban sus primeras rentas en el marcador (18-10). Pedro Martínez, optó por dar entrada la pista a Jankovic, que no jugó en Gran Canaria, y Van Rossom. El griego, fue de más a menos y sobre todo en el segundo cuarto empezó a anotar y a ayudar en el rebote, en definitiva a sumar, dato importante.

Con el partido controlado, una acción de Oriola y dos tiros libres de Thomas propiciaron el primer intento de ruptura del partido (48-30), aunque Neumann neutralizó antes del descanso (48-34).

Tercer cuarto con Rafa Martínez

El paso por los vestuarios le sentó de maravilla al Valencia Basket. La entrada en la pista del capitán Rafa Martínez dinamitó al equipo. El conjunto de Pedro Martínez encadenó cuato triples consecutivos que cerraron el choque con Rafa Martínez, Sikma y San Emeterio como ejecutores (67-40). Los de Leibenath, cegados en intentar recuperar rentas a base de los triples, entregaron la cuchara y los últimos minutos se les hicieron eternos.

El entrenador catalán, optó por dar entrada a Sato con lo que dispuso de los doce jugadores que ayer tenía a su disposición. El centroafricano, aprovechó bien de nuevo los minutos para anotar y volverse a ganar el aplauso de la grada. Las ventaja siguió aumentando en el útimo periodo y rozaba el esperpento para los alemanes tras una nueva canasta de Jankovic (93-54). Las acciones finales sirvieron para dar un pobre maquillaje al electrónico y certificar que el Valencia Basket está fuerte e intimida.

Pedro Martínez considera necesario el refuerzo interior

Alegría contenida, así se mostró Pedro Martínez ayer tras finalizar el choque con el triunfo contundente para el conjunto valenciano. El entrenador «taronja» apuntó que pese al resultado, el Ulm no es tan mal equipo como se vio ayer en la cancha. «En condiciones normales ellos son un un mejor conjunto que lo que se ha visto aquí. Su anotación no ha sido normal, debido a nuestra actividad defensiva y también en parte porque se han colapsado por el juego», señaló. Pedro Martínez tuvo palabras para el base belga, Van Rossom, que jugó 17 minutos, volviendo poco a poco a coger ritmo tras su larga lesión. «Sam está muy bien de la rodilla, por eso juega según las necesidades del equipo», afirmó. El técnico catalán tuvo también palabras sobre el refuerzo que sigue buscando el club para cubrir la vacante de Bryant y que considera necesario «fichar con rapidez y nervios no es positivo y aunque ahora no es necesario, la temporada es muy larga y deberemos de fichar, es lo normal», indicó.