Considerado un entrenador puente entre la vieja escuela defensivista italiana y el aperturismo al juego de toque, Cesare Prandelli sabe que para recuperar la competitividad del Valencia deberá recurrir a las «viejas recetas» con las que el técnico bresciano empezó a formarse, allá por los años 80, bajo la tutela de estrategas como Giovanni Trappatoni. El futuro valencianista pasa por recuperar el arte de defender bien, una habilidad olvidada en 13 meses seguidos encajando goles fuera de casa. Sobre la base de saber ejecutar «cuatro ideas básicas», Prandelli espera que su equipo se desenvuelva de forma práctica y eficaz, con la provebial armoniosidad que hace temibles a los mejores equipos italianos. Una aspiración que parece todavía lejana, a tenor de los defectos estructurales que arrastra el equipo y que el propio Prandelli apuntó ayer en voz alta.

Después de dos intensas semanas para aplicar los primeros conceptos de su método, la primera prueba para el antepenúltimo clasificado se presenta esta tarde en Gijón, frente al Sporting. Un duelo feroz contra un rival que solo tiene un punto más en la clasificación, que lleva cuatro derrotas seguidas, que ha sucumbido con estrépito ante el Barcelona y el Atlético, pero que en el viejo Molinón ha plantado batalla ganando al Athletic y al Leganés. Se prevé lluvia a la hora del encuentro y ya en la temporada pasada, el perfil batallador del Sporting se le atragantó al Valencia. Se ganó muy apuradamente en Gijón (0-1, con un grandísimo Jaume, en el último duelo en el que no se encajaron tantos lejos de Mestalla) y se perdió 0-1 en el partido de vuelta en Mestalla, con el bloque dirigido por Gary Neville en completa caída libre.

Prandelli no contará para este partido con uno de los jugadores llamados a marcar la diferencia, como Luis Nani, que ayer no se entrenó con el resto del grupo y que no se ha recuperado a tiempo de sus molestias musculares en el recto anterior del cuádriceps, que arrastra desde el encuentro ante el Atlético. Quien sí parece que va a entrar en el «once» es Eliaquim Mangala. El central francés completó el entrenamiento matinal sin problemas aparentes después de que Prandelli lo reservase en el ensayo contra el Juvenil el pasado jueves por sus dolores en el bíceps femoral. En una convocatoria sin jugadores del filial, Prandelli ha citado a los tres porteros. En principio no es ningún indicio de duda técnica, en una de las demarcaciones más reñidas, y se justifica por las molestias físicas de Diego Alves.

Con la incógnita de la portería, el resto del equipo puede estar integrado por Montoya, Garay, Mangala y Gayà en la defensa. En el centro del campo Enzo y Mario Suárez formarán el doble pivote. Las tres mediapuntas serán para Cancelo, Parejo y Mina, con Rodrigo Moreno ejerciendo de «nueve».