El piloto valenciano de Moto3 Arón Canet (Estrella Galicia 0,0) acabó eufórico el Gran Premio de Australia y declaró que «nada más cruzar la meta» se puso a «llorar de la emoción», pues el joven de 17 años consiguió con su tercera posición subirse al podio por primera vez en el año de su estreno en el Mundial.

«Nada más cruzar la meta me he puesto a llorar de la emoción; creo eso lo resume todo. Lograr tu primer podio mundialista es algo impresionante y más en una carrera tan caótica, en la que me he caído al principio, han sacado bandera roja y he podido volver a salir», explicó en declaraciones facilitadas por su equipo.

Fue un día redondo para el valenciano, ya que no solo rodó a un gran ritmo sino que pudo aprovechar la bandera roja para conseguir el que ha sido su mejor resultado hasta la fecha. «En la segunda carrera, he remontado posiciones luchando en el segundo grupo. En las últimas vueltas, he decidido echarle valor y colocarme primero de grupo para tirar y tratar de romperlo», manifestó.

«Lo he conseguido, he abierto un poco de hueco, pero Darryn Binder ha tirado conmigo e incluso me ha adelantado en el penúltimo paso por meta. En ese momento ha sido cuando me he dado cuenta de que si seguía su estela podía aprovechar para adelantarle a rebufo en la recta de meta. Y así lo he hecho», comentó.

Por último, Canet quiso agradecer también todo el apoyo y el trabajo de su equipo en su año de debut. «Al verme tercero en las pantallas, ha sido cuando no he podido contener las lágrimas. Ahora me doy cuenta de que la experiencia acumulada a lo largo de todo el año, junto a mi equipo técnico en el Estrella Galicia 0,0, ha dado sus frutos en forma de podio, por lo que no puedo estar más contento», finalizó.

El británico Cal Crutchlow (Honda RC 213 V) y el suizo Thomas Luthi (Kalex) aprovecharon las debilidades de los campeones de sus respectivas categorías para lograr la victoria en el Gran Premio de Australia de motociclismo que se disputó en Phillip Island, en donde no falló el surafricano Brad Binder (KTM), cómodo vencedor en Moto3.

Crutchlow sumó su segunda victoria en MotoGP tras verse beneficiado por el error que cometió el español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), cuando era líder destacado de la carrera pues el ya matemáticamente campeón del mundo de 2016, se escapó en solitario, pero un error al frenar demasiado tarde en la curva cuatro de la novena vuelta le hizo caer y dejar el camino expedito a su rival.

No hubo más novedades en lo que restó de competición, en la que Crutchlow, Rossi y Viñales consolidaron sus posiciones mientras Lorenzo consiguió remontar hasta sexta plaza final.

El suizo Thomas Luthi (Kalex) se adjudicó su segunda victoria consecutiva y la cuarta de la temporada por apenas diez milésimas de segundo respecto al italiano Franco Morbidelli (Kalex). Luthi superó por rebufo y sobre la misma línea de meta a su rival italiano para meterse de lleno en la pelea por el mundial de Moto2, al concluir duodécimo el francés Johann Zarco (Kalex) y no atravesar la línea de meta, por caída, el español Alex Rins (Kalex). El piloto suizo es ahora segundo con 204 puntos, tres más que Alex Rins (201) y con 22 menos que el francés (226).

El surafricano Brad Binder (KTM), matemáticamente campeón del mundo de Moto3 desde Motorland Aragón, se adjudicó la sexta victoria de la temporada, a pesar de que la carrera tuvo que ser detenida al término de la quinta vuelta por un accidente múltiple, que no produjo lesiones graves a los pilotos implicados.