­Bicampeón mundial de maratón (Atenas 1997 y Sevilla 1999) y retirado desde el año 2000, Abel Antón (Soria, 54 años) analiza las claves del Maratón de Valencia del próximo domingo.

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­¿Qué opinión le parece el salto que ha dado el Maratón de Valencia en los últimos años?

Las cosas se han hecho bien y hay un grupo de personas que han hecho subir este Maratón, como el club Correcaminos con Paco Borao, que ha hecho mucho para que creciese. Se está consiguiendo y la gente quiere venir a Valencia. Se hacen buenas marcas y cada año va crece. 19.000 corredores es un número muy importante, está entre los ocho mejores maratones de Europa y no tiene límites. Y va a crecer mucho más por varias razones: se cuida bien al atleta popular, los de élite hacen buenas marcas, la ciudad es llana y el trato al atleta popular es muy bueno. Por eso en Valencia se practica mucho deporte y la gente corre mucho, es la ciudad del running. Un día normal del año vas a correr al Turia y tienes que apartar a la gente. Hace quince años te llamaban loco por ir corriendo.

¿Qué destaca de la carrera en la ciudad de Valencia?

Se ha creado un gran ambiente alrededor de la carrera. La gente viene para disfrutar y conocer a otra gente y pasar el fin de semana en Valencia. Hay mucho de turismo, porque se ha convertido en venir para pasar el fin de semana y disfrutar con la familia, como pasa en Nueva York o Londres. Es de los mejores maratones del mundo y la gente disfruta de cosas como la llegada, que es preciosa. Correr con 19.000 personas significa disfrutar desde la salida.

¿Qué se puede hacer para tener el cartel del de Nueva York?

Valencia trata muy bien al atleta popular y al de élite. La diferencia con Nueva York es la ciudad. La gente va allí por ser Nueva York. El trato del atleta popular aquí es excelente, mucho mejor que allí, donde deja mucho que desear. La diferencia es la ciudad. Allí tardas cuatro años en poder ir, te cobran lo que quieren... Valencia tiene que llegar al nivel de Berlín o Rotterdam, ahí es donde tiene que pelear ahora Valencia. Nueva York se vende sola.

¿Qué le aconseja a los que se estrenan este domingo?

Esta semana hay que descansar mucho, tener controlada la hidratación, tomar hidratos y no machacarse en el entrenamiento. El entrenamiento se hace antes, porque hay que llegar descansado. Si es la primera vez, hay que ser cauto, tener precaución y empezar poco a poco para saber cuál es tu ritmo y no pasar de las 160-165 pulsaciones. El maratón empieza en el kilómetro 35, ahí vienen los problemas.

¿Y cómo se gestiona el famoso «muro»?

El muro es el entrenamiento. El que llega mucho al muro es porque ha forzado mucho en la carrera o no se ha entrenado lo que debía. Si entrenas bien y vas con precauación, el muro es menor.

¿Por qué la gente quiere correr maratones?

Esto es una bola que crece: mi compañero corre, mi vecino corre, voy a probar... Tampoco aconsejo que todo el mundo corra un maratón, porque es duro. Sí que haga deporte y corra para estar bien. Corremos un poco por el estrés y la vida que llevamos. Correr relaja, te hace pensar en otras cosas, haces ejercicio y estás mucho mejor.

¿Se puede tener sexo el día de antes del maratón?

Totalmente, sin ningún problema. El día de antes a la carrera se puede tener sexo moderado, otra cosa es estar tres horas. Y luego, a dormir.