Cinco valencianos campeones de Europa Sub 17. Una generación futbolística inigualable. Una cantera que hace vibrar a pueblos como Foios, de donde es Ferran Torres, pese a que su padre, un electricista conocido conocido en la localidad como «Cucala», el fútbol como que le viene un poco al pairo. El pasado viernes, en la Plaza Francesc Badía de Foios, una pantalla gigante reunió a 200 personas para ver la final ante Inglaterra. Había entusiasmo en el pueblo. Ambiente de fiesta. Como cuando emergen figuras como El Soro.

En Massanassa también se acordaron de Carlos Beitia Cardós. Juega en el CD Roda de Castellón, equipo vinculado al Villarreal, pero de pequeño empezó jugando en el CDB Massanassa. El pueblo ya le reconoció sus méritos el año pasado, cuando fue galardonado como mejor deportista promesa de la localidad. Beitia fue la incorporación de última hora. Le llamaron de emergencia para jugar la final del Europeo por la lesión de un compañero, viajó a Croacia, y jugó la segunda parte ante Inglaterra.

Los Chust, Víctor y Marc, son de Torrent. El primero de ellos disputó el torneo de Brunete y lo fichó el Real Madrid. Su hermano todavía está en los alevines del Valencia CF. Víctor no pudo resistirse a la oferta del Madrid, y se fue directo al juvenil B. Tampoco pudo resistirse Abel Ruiz Ortega, de Almussafes, que a los 12 años se fue directo a La Masía. Viajó a Barcelona junto a su hermano, que estudiaba en la Universidad de Barcelona, para vigilarle de cerca. Su fichaje estuvo cerca de truncar el traspaso ya cerrado de Jordi Alba. En Mestalla no gustó el «guinde».

Quien rechazó una oferta del FC Barcelona fue Hugo Guillamón Sanmartín. Es de l´Eliana. Juega en el juvenil B del Valencia y es el capitán y el auténtico líder de la generación de 2000. Amigo íntimo de Ferran Torres, es un ejemplo de jugador y estudiante.