Nunca fue excusa para Pedro Martínez ni tampoco lo es para Txus Vidorreta. Las lesiones y problemas físicos se han convertido en el principal caballo de batalla del Valencia Basket en este inicio de temporada, hecho que ha impedido hasta el momento que todos los jugadores puedan estar disponibles para un partido.

El Eurobasket tuvo el peaje de una pretemporada con cinco jugadores -Sastre, Vives, San Emeterio, Diot y Dubljevic- ausentes. El francés Diot regresó del torneo con problemas en la rodilla mientras que San Emeterio también arrastraba ligeras molestias musculares. La Supercopa de Gran Canaria, con un título a dos partidos y que al final se consiguió, llevó a que los dos jugadores forzarán. El riesgo era asumido y de momento los dos no han podido debutar ni en la liga ni tampoco en la Euroliga. A estos problemas físicos unió la baja de Williams.

El pívot estadounidense cayó lesionado en agosto y, tras un tratamiento conservador, ahora mismo se encuentra en otro más agresivo que no permitirá jugar al exjugador del Unics Kazan hasta mediados de noviembre en las mejores previsiones. Por si esto no fuera poco, en la semana previa a la Supercopa, Abalde tuvo una lesión en el cuádriceps que le privó de estar en Gran Canaria y en las dos primeras jornadas de liga. Pleiss superó un esguince de tobillo para no perderse el partido de hace dos semanas en Tenerife y ahora se está pendiente de Dubljevic tras fracturarse el tabique nasal el pasado domingo.

Ante esta tesitura, la gestión de minutos está siendo compleja para Vidorreta. Hay dos jugadores del Valencia Basket que se encuentran entre los doce con más minutos de toda la liga, Sastre y Green. Es curioso lo del balear, que no ha tenido vacaciones tras haber jugado con España en el Eurobasket y que acumula una media de casi 30 minutos por encuentro. A ese esfuerzo se le deben sumar los 29 que jugó en Moscú ante el Khimki en la Euroliga.

El californiano, por su parte, supera los 27 minutos de media por encuentro en la liga mientras que en Europa apenas descansó 7 minutos. Will Thomas es el tercero en este apartado con 27 minutos en competición doméstica, así como Vives, que llegó a los 30 jugados ante el Khimki.

No es de extrañar, pues, la falta de frescura de un bloque acostumbrado a desarrollar un trabajo muy físico, pero que acusa síntomas de haber tenido una pretemporada anormal ante la falta de efectivos: llegaron a coincidir apenas seis jugadores del primer equipo.

El objetivo pasa a partir de ahora por recuperar paulatinamente a los jugadores que se encuentran lesionados. Los dos siguientes en volver serán San Emeterio y Diot. El retorno del cántabro se antoja capital para dotar al equipo de su liderazgo habitual, así como de una opción clara en el juego exterior que ahora mismo vive del gran momento de Sastre y Green y de la aportación de Rafa Martínez y del recién incorporado Abalde.

El francés, por su parte, supondrá un balón de oxígeno para Vives y Van Rossom. Diot dota al equipo de un ritmo rápido, antagónico al juego del catalán, mientras que Van Rossom ha decaído algo tras su retorno fulgurante a la entidad «taronja».

Con los 14 puntos anotados ante el Real Madrid, el escolta del Valencia Basket Erick Green se ha convertido en el máximo anotador de la liga con 78 puntos convertidos y una media de 19,5 por encuentro. Su perseguidor es el jugador del Gipuzkoa Basket, Norel, con 74 puntos anotados.