El Valencia Basket culminó su semana perfecta y su quinta victoria en diez días, tras derrotar en un partido muy duro al Gran Canaria. El conjunto de Vidorreta sacó adelante el encuentro gracias a su talento y sobre todo al enorme desgaste defensivo que pudo desplegar, pese a la acumulación de partidos en los últimos días.

El técnico bilbaíno trató de manejar mejor que nunca el banquillo «taronja» con el objetivo de que sus jugadores no perdieran la frescura en la pista. Erick Green volvió a ser el máximo referente a nivel ofensivo, mientras que Abalde volvió a demostrar que se encuentra en un gran estado de forma tras firmar los mismos créditos de valoración que ante el Unicaja en la Euroliga.

Positivo está siendo para el Valencia Basket la aportación creciente de Dubljevic, que tras un arranque de temporada irregular poco a poco empieza a demostrar lo determinante que llegó a ser la pasada campaña. Rudez se quedó sin poder debutar. Con la victoria de ayer el Valencia Basket aprovechó el tropiezo entre otros del Barcelona, para ascender a la segunda plaza igualado con el Fuenlabrada, y a solo una del único equipo invicto, el Real Madrid.

El Gran Canaria demostró desde el inicio tener muy visto al Valencia Basket. Luis Casimiro planteó una defensa agresiva muy centrada en la salida de balón de los bases y también con ayudas a la marca sobre Erick Green. No le salió mal esta apuesta a los insulares que con Balvin dominando en la pintura tomaban las primeras ventajas (15-18).

El acierto desde el perímetro de los «taronja» impidió que los canarios pusieran grandes diferencias, aunque se marcharan por debajo en el marcador al final del primer cuarto (25-26). En el segundo cuarto el Valencia Basket siguió incómodo en la pista cometiendo errores en forma de pérdida de balón que provocaron que el Gran Canaria, con una buena conexión entre Oliver y Balvin, consiguieran su máxima ventaja hasta el momento (36-41).

En la primera situación compleja del choque apareció primero Vives y luego el omnipresente Green para abrir el aro canario y sobre todo trabajar más el aspecto defensivo. Eso trajo como consecuencia un parcial de 11-0 en el tramo final de la primera parte para conseguir llegar al descanso con un marcador favorable.

El inicio de la segunda mitad extendió el buen hacer de los de Vidorreta que, con un gran trabajo en aro propio, fueron desactivando las opciones anotadas de los insulares para conseguir la máxima ventaja de todo el partido tras una canasta de Dubljevic (63-50).

Reaccionó el Gran Canaria aprovechando las pérdidas de balón de los «taronja» para igualar casi el marcador tras un parcial de 0-8 (63-58). Cuando peor estaba el partido para los valencianos, los árbitros señalaron una técnica a Luis Casimiro, quien protestó una decisión arbitral. Amparados en Dubljevic el Valencia Basket llegaba al último cuarto con una buena renta (71-60).

La conexión de Badalona entre Vives y Abalde disparó el electrónico y vaticinaba un triunfo cómodo (80-68). Los canarios no se rindieron, lo que, unido al cansancio del Valencia Basket, mantuvo la incertidumbre hasta el final. El conjunto de Vidorreta administró bien el tiempo y el físico para solventar el partido y conseguir un nuevo triunfo frente en una semana de locura.

El mes de octubre se cierra con ocho victorias en diez encuentros disputados. Ahora, pequeña tregua hasta el jueves cuando esperará el campeón de Europa, Fenerbahce.