La selección española se entrenó este lunes en el estadio Petrovski de la antigua capital zarista sin el futbolista del Manchester City David Silva, en una sesión marcada por el viento gélido.

Silva trabajó al margen y podría ser la segunda baja de la Roja en el partido amistoso de este martes ante el anfitrión del próximo Mundial, Rusia, tras la ya conocida de Francisco Alarcón 'Isco'.

Los internacionales españoles sintieron en sus propias carnes el frío y, especialmente, la humedad característica de la ciudad de los canales y del río Neva que desemboca en el mar Báltico.

Jugadores como Iniesta o Piqué saltaron al campo desprotegidos y tuvieron que pedir protección, en forma de bufandas y gorros, ya que se les congelaban las orejas.

El entrenamiento transcurrió entre el magnífico ambiente de los jugadores de la selección española, que no dejaron de reír y bromear durante los quince minutos abiertos a la prensa.

Precisamente, españoles y rusos se entrenaron en el Petrovski, antiguo estadio del Zenit, para no dañar el césped del San Petersburgo Arena, que ya fue muy criticado en la pasada Copa Confederaciones y que acogerá una de las semifinales del Mundial.