El Villarreal cayó ayer en su visita al Real Betis en el Estadio Benito Villamarín (2-1) en un choque marcado por la expulsión de Bonera, que dejó a los amarillos en inferioridad desde el minuto 30. Los amarillos, pese a jugar con diez, lo intentaron todo en la segunda parte para igualar el marcador -gol de Bacca incluido-, pero los verdiblancos con el partido a favor, terminaron rematando en el minuto 64 de nuevo por medio de Loren.

La primera media hora fue como pronosticó Calleja en la previa: una lucha encarnizada por el balón. Con la pelota moviéndose con velocidad, el Betis se sentía cómodo ante un Submarino que trataba de mantener la posesión. Pero todo iba a cambiar a la media hora. Tras una pérdida en la línea de tres cuartos, Bonera salió al corte y derribó a Rubén Castro y el colegiado, contundente, expulsó al jugador italiano con roja directa. El guión cambiaba -y el partido se complicaba- para un Villarreal obligado a jugar durante una hora con diez.

Los amarillos aguantaron bien las sacudidas verdiblancas casi hasta el descanso, cuando el debutante Loren, ya en la última jugada, conectó un impresionante disparo lejano que ponía por delante a los sevillanos.

Pese a las dificultades, el Villarreal no bajó los brazos y salió con fuerzas renovadas en la segunda parte. Los amarillos encerraron al Betis en su área y, en el 58, Bacca a punto estuvo de poner el empate con un tiro al palo. La suerte no estaba con el Submarino y, en el 64, de nuevo Loren peinaba lo justo de cabeza para poner el 2-0.

A diez minutos del final, un penalti de Barragán sobre Cheryshev abrió el partido y permitió que los amarillos recortaran distancias por medio de Bacca, pero ya no quedaba tiempo y el Submarino encajaba su primera derrota seis jornadas después.