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Polideportivo

El gran salto del atletismo femenino valenciano

65 años de carreras. La primera competición femenina se celebró en el campo de Mestalla en 1933

Concha Montaner recogió ayer en Birmingham el bronce del Mundial de Moscú 2006. concha montaner

La primera competición atlética femenina se celebró en el campo de Mestalla el 6 de enero de 1933. Este festival fue organizado por el Instituto Previsor del Trabajo, a beneficio de los obreros profesionales en paro forzoso, en colaboración con la F.U.E., una organización que agrupó a un gran número de estudiantes a favor de la escuela pública, las colonias escolares, el deporte, el teatro y la universidad popular. Este festival contó con pruebas de atletismo y un partido de rugby entre el Universitary y el equipo de la F.U.E, campeón regional.

Las pruebas femeninas fueron carreras de 60 y 150 metros y lanzamiento de peso. Las atletas participantes fueron Pepita Miralles, Pilar Soler, Angelita Soler, Alejandra Soler, Reines, Miralles, Bailén. Posteriormente, se siguieron celebrando más festivales femeninos.

Las atletas de la F.U.E, entre ellas la añorada Alejandra Soler, concebían la práctica del deporte como un elemento de progreso. Salir a correr o a nadar era una manera de sentirse libre y luchar por la igualdad entre hombres y mujeres. Las mujeres comprometidas con los valores republicanos reclamaban una sociedad igualitaria y trataron de quitarse de encima los prejuicios de una sociedad machista en la que no podían salir a la calle si no iban acompañadas. Una sociedad paternalista en la que se les excluía de numerosas actividades y se les destinaba a la procreación. Contra eso lucharon un pequeño grupos de atletas, ciclistas, nadadoras, excursionistas, tenistas y gimnastas.

La Guerra Civil acabó con esta primavera deportiva y hasta el año 1963 las valencianas no pudieron practicar el atletismo. El fracasos estrepitoso español en los Juegos de 1952 en Helsinki y Roma 1960, obligaron al régimen franquista a replantearse su política deportiva. Fruto de ello fueron las secciones deportivas de los clubes y una tímida presencia de la mujer en las canchas, piscinas y pistas.

En 1963, el atletismo en València vivió una época de expansión, gracias a José Antonio Caparrós, un presidente muy activo. Las atletas más destacadas de los 60 fueron Manoli López de Arce, quinta en el ranking nacional en salto de longitud; Amparo Betes, tercera mejor marca española en peso; Matilde Bixquert en 80 vallas, la primera atleta internacional, y Concha Carpí, que batió los récords absolutos de 100, 200, 400, 800 y 1500.

Los 70 y 80 estuvieron dominadas por la figura de la saltadora Merche Cano; los 90 fueron los años de la maratoniana y la olímpica Mónica Pont y de Marta Fernández, con dos mundiales de cross en su haber. Muchas ellas tuvieron que vencer un gran número de dificultades por el hecho de ser mujer. Muchas tuvieron que correr casi a escondidas.

El atletismo femenino cuenta con un club, el València Esports, con un palmarés excepcional. Atletas como Glory Alozie, cuarta en los Mundiales de París 2003, o Niurka Montalvo, campeona del Mundo en Sevilla 1999, han marcado una época. Equipos como el Playas de Castellón, el Safor, el Silla o la Juventud Atlética de Elche poseen unos buenos equipos femeninos. Atentos a Fátima Diame. En cuanto a la presencia de las mujeres en las carreras de a pie, en las distancias entre 5 y 10 kilómetros, las atletas superan con facilidad el 45% de los participantes, mientras que en el maratón no llega al 20%.

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