Finalizada la feria taurina de las fiestas josefinas, la plaza de toros de València inició ayer su conversión en pista de tenis para albergar la eliminatoria de cuartos de final de la Copa Davis, entre los equipos de España y Alemania, del próximo viernes 6 al domingo 8 de abril.

En este sentido, el montaje de la pista que se va a instalar en el coso de la calle Xàtiva comenzó ayer con los primeros trabajos sobre el albero. Está previsto que la plaza se transforme en una gran cancha con capacidad para 11.000 espectadores en las gradas. Todo ello en un plazo de apenas tres días, con la intención de que la tierra batida pueda tener la semana que viene para aclimatarse a las condiciones meteorológicas de la capital del Túria y responda con garantías durante la celebración de los partidos.

El objetivo, por tanto, es que este viernes el montaje esté finalizado. Todo un reto contra el reloj para que València pueda ser la sede de una elimiantora de la Copa Davis 13 años después y con una inversión económica de las instituciones que superará los 330.000 euros.

Durante la jornada de ayer se llevó a cabo, en primera instancia, la nivelación del suelo para dejarlo en una cota cero, esto es, sin ningún tipo de pendiente. A partir de ahí los operarios empezaron a erigir un pequeño muro perimetral de hormigón. Dentro de él es donde se acondicionará el suelo para la instalación de la pista sobre la que los mejores tenistas españoles y alemanes competirán por el paso a las semifinales del torneo por equipos más prestigioso a nivel internacional.

Un total de 250 toneladas de material entrarán en la plaza de toros para llevar a cabo estas obras, que incluyen la colocación de una capa de 15 centímetros de drenaje con cascotes cerámicos por debajo de otra capa de pastilla de 6 centímetros que proporcionará una gran capacidad filtrante. Por encima de estas dos capas se instalará otra superior de tierra batida de un total de 6 milímetros de alto.