En declaraciones al Financial Times, Linares señala que la multinacional española confía en que sus amplias operaciones en América Latina generen este año un crecimiento de dos dígitos.

Linares afirma que Telefónica, la tercera del sector por capitalización, ha identificado además importantes oportunidades de reducción de costos, sobre todo en la Europa del Este.

Aunque algunos analistas dudan de que la compañía pueda cumplir su objetivo de 2.30 euros de dividendo por acción en el 2010 en vista de la crisis, Linares lo considera posible "dado el alto potencial de crecimiento en Latinoamérica".

El mayor negocio de Telefónica en Latinoamérica está en Brasil, país que sufrió una caída del 3.6 por ciento de su PIB en el cuarto trimestre, pese a lo cual Linares explica que su compañía no se ha visto todavía afectada y pronostica un fuerte crecimiento este año.

Así, por ejemplo, un 22 por ciento de los brasileños carece aún de teléfono móvil.

Telefónica está buscando formas de reducir sus costos de capital y operativos, por ejemplo mediante acuerdos con las compañías rivales para compartir redes de comunicación.

Telefónica y la británica Vodafone discuten actualmente la posibilidad de compartir infraestructuras en la República Checa, Alemania, España y el Reino Unido, donde ambas empresas ofrecen servicios de telefonía móvil.

Telefónica puede también conseguir otros ahorros gracias a su relación con China Unicom, la segunda compañía china de telefonía móvil en volumen, en la que el grupo español tiene una participación del 5.4 por ciento.

Según Linares, Telefónica y China Unicom están tratando de la posibilidad de comprar conjuntamente teléfonos móviles, lo que debería permitirles beneficiarse de mayores descuentos por parte de los fabricantes.

La compañía española tiene también una alianza industrial con Telecom Italia, de la que se convirtió en principal accionista en el 2007 en un intento de impedir que América Móvil, del mexicano Carlos Slim, se hiciese con una participación en la misma.

Telefónica pagó entonces 2.80 euros por acción por su participación del 10 por ciento en Telecom Italia, pero ayer, jueves, las acciones valían sólo 0.90 euros.

Pese a todo, en la entrevista con el diario británico, Linares expresa su apoyo al plan del consejero delegado de Telecom Italia, Franco Bernabé, para intentar darle un vuelco a la empresa.