El president de la Generalitat, Francisco Camps, ha pedido hoy un "compromiso nacional" para hablar de economía en lugar de política con el fin de salir de la crisis, mientras que empresarios como el presidente de Mercadona, Juan Roig, han exigido a los políticos decisiones "valientes y consensuadas".
Camps ha presidido la inauguración del Congreso AECOC 2009 (Asociación Empresarial de Fabricantes y Distribuidores de Frutas y Hortalizas), que este año reúne en Valencia a más de un millar de responsables de empresas del sector bajo el lema "Comprender y superar la crisis".
Durante su intervención, ha asegurado que, pese a la situación económica, hay que seguir planificando el futuro "con ilusión y optimismo" y para ello "sería interesante para España" dejar de hablar de política "durante una temporada" y hablar de "desconfianza y de pérdida de puestos de trabajo".
"Si tuviéramos un compromiso nacional de dejar de hablar de política y hablar de economía, daríamos un paso hacia adelante para salir de esta crisis", ha manifestado Camps.
Además, ha apostado por "dejar de hablar del pasado" porque mirar hacia atrás "no vale para nada" aunque en los últimos años se hayan hecho bien las cosas, ya que ahora hay que "mirar hacia el futuro".
Camps ha destacado que existe "una tremenda crisis de confianza" tanto en las familias como en las empresas, y por ello se deben trasladar mensajes "de confianza, de posibilidad y de fuerza".
La Comunitat Valenciana es, según ha afirmado, "un territorio más de una gran nación que necesita reencontrar la confianza en sus posibilidades".
ROIG: "LA CRISIS SERÁ PEOR"
El presidente de Mercadona y presidente de honor de la asociación de fabricantes y distribuidores Aecoc, Juan Roig, calificó hoy la coyuntura económica actual de "supercrisis" y consideró que "lo peor no ha pasado", sino que 2010 será "mucho peor" que este año.
"Hay quien argumenta que hablar de la crisis es malo, pero lo que es malo es no reconocerla y no tomar medidas", apuntó el presidente de Mercadona durante su intervención en la inauguración del Congreso Aecoc 2009, donde señaló que la evolución de los ejercicios siguientes (2011, 2012 y 2013) dependerá de la "actitud" que adopten los españoles. "De momento creo que vamos perdiendo", apuntó.
Roig consideró que "en plenas elecciones generales" se tardó en reconocer la coyuntura, que a su juicio vino causada por factores financieros y por el "pinchazo" de la burbuja inmobiliaria, y, del mismo modo, está "costando" encontrar soluciones. "Estamos esperando salir de la crisis a través de lo que hagan los demás países y de las medidas que tomen nuestros gobernantes", señaló.
Ante la crisis, explicó que Mercadona reconoció en primer lugar que tenía una crisis interna, que estaba "amuermada" y se había "dormido", después de crecer "durante mucho tiempo" a dos dígitos tanto en ventas como en beneficio.
"Eso ha acabado, teníamos que reinventarnos y añadir valor", apuntó el presidente de Mercadona, quien hizo referencia a la bajada de precios en la cadena de supermercados, que continuará en el futuro próximo, al cierre de tiendas que no "cumplían el modelo", y a la revisión del surtido y eliminación de las referencias que desde el punto de vista de la empresa no añadían valor.
RETIRADA DE REFERENCIAS
A este respecto, Roig señaló que "es imposible hacer tortillas sin romper huevos", en referencia al malestar generado entre los fabricantes afectados, y reconoció que está recibiendo críticas, que "ayudan a aprender" en qué se ha equivocado la compañía. En este sentido, reconoció que en algunas medidas han sido drásticas y que se pueden haber equivocado en las formas.
El resultado de estas medidas ante la crisis, según agregó, ha sido un incremento del número de clientes y del número de unidades de compra. La cadena alcanzará la previsión de beneficios realizada para 2009, que recortaba a la mitad las ganancias del año anterior. "Además de bajar los precios, hemos mantenido los 61.500 puestos de trabajo en la empresa", destacó el presidente.
Para superar la crisis, Roig defendió la necesidad de "cambiar la actitud" porque España se encuentra en una "situación difícil y va para largo" y apostó por trabajar "más y mejor, incrementar la productividad y ser cada vez más competitivos".
El Congreso Aecoc 2009 fue inaugurado hoy por el presidente de Aecoc, Juan José Guibelalde, quien señaló que la agresiva política de precios que el sector del gran consumo ha aplicado "quizá de forma poco meditada" ha sido una de las causas de la pérdida de valor en la cadena agroalimentaria, que en su opinión será difícil de recuperar.
Guibelalde, que consideró que la recuperación de la crisis será lenta y costosa, repasó las medidas adoptadas por determinadas empresas para hacer frente a la crisis, con la venta de activos infrautilizados, fusiones, adquisiciones o reestructuración de horarios. ""No era razonable esperar a que escampe y quienes han hecho los deberes saldrán fortalecidos", concluyó.
