Menos de 89.000 personas se verán afectadas en España por el nuevo impuesto extraordinario que prepara el Gobierno central para gravar la rentas más altas. Según datos difundidos ayer por la Asociación de Técnicos de Hacienda (Ghesta) apenas 88.938 personas declararon en 2006 (último ejercicio de aplicación del Impuesto de Patrimonio) patrimonios superiores al millón de euros. Según las informaciones avanzadas ayer por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, el plan de recorte del déficit incluirá una nueva tasa que afectará a aquellas personas que sumando todo lo que tienen (propiedades, acciones, ingresos y ahorros) superen la cifra mágica del millón de euros.

El impuesto, no obstante, tendrá un alcance limitado. 87.471 personas declararon en 2006 un patrimonio neto de entre 1 millón y 10 millones de euros, mientras que sólo 1.467 hicieron lo propio por importe de más de 10 millones de euros. Ghesta denuncia que estas cifras son inferiores a las estimaciones elaboradas por estudios de banca privada como Banif o Santander. De hecho, los técnicos de Hacienda estiman que 21.396 personas con propiedades superiores a un millón de euros no fueron sinceras en su declaración de patrimonio.

Ghesta sostiene que cuanto mayor es el patrimonio mayor es el fraude. Y reclama al Gobierno que si aprueba un nuevo impuesto cierre las vías para eludirlo. Cita a las Sicav (sociedad de inversión con tributación reducida) y las sociedades patrimoniales o las instrumentales.