"Quienes ahora tienen 30 ó 40 años tendrán que trabajar más tiempo". Así de taxativo se mostró ayer en Zamora el director general del Instituto Nacional de la Seguridad Social, Fidel Ferreras, para quien retrasar la edad de jubilación a medio plazo, es decir, "en quince o veinte años", constituye una medida que "habrá que adoptar con total seguridad aunque sea de forma paulatina".

El razonamiento del director general se sostiene en la actual evolución demográfica, con índices de natalidad que rozan los 1,3 niños por cada mujer frente a una tasa de reposición de la sociedad del 2,1. "Las mujeres quieren tener menos hijos, los hijos son los futuros cotizantes y, a su vez, los próximos padres de los futuros trabajadores, de modo que si no hay cotizantes, la Seguridad Social no se mantiene". Ferreras reflexiona que "si entran a trabajar menos que los que salen para ser pensionistas, en quince o veinte años tendremos problemas con el sistema de pensiones", de ahí que el director general del INSS apueste por reformas "lentas y paulatinas, las bruscas nunca funcionan".

El alto cargo del Ministerio de Trabajo transmitió un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía ya que "nadie puede atreverse a poner en tela de juicio el sistema de protección social", defendió a la vez que instó a "no mezclar la crisis económica y financiera con la Seguridad Social".

Superávit de las cuentas

En este sentido, el director del INSS sopesa que "no somos los mejores de todos pero podemos decir bien alto que somos de los pocos países que tienen un superávit dentro de las cuentas de la Seguridad Social", añade en referencia al 0,6% del Producto Interior Bruto (PIB) que registra el país en este apartado. Este porcentaje se traduce en la cantidad de 7.000 millones de euros de superávit y en un fondo de reserva de la Seguridad Social "de más de 62.000 millones de euros". Ferreras ejemplifica la situación con esta hipótesis: "Si ahora mismo no entrara ni un solo euro en las arcas de la Seguridad Social, cosa imposible porque cotizantes hay, habría dinero suficiente como para pagar las pensiones más allá de siete meses", indica para desmentir cualquier supuesto caso de crisis actual en el sistema de prestaciones.