El Puerto de Barcelona enlazará antes de fin de año con ferrocarril con la frontera francesa a través de una conexión de ancho internacional que ya ha sido denominado como "tercer carril". La puesta en servicio de la línea de mercancías, según el ente gestor de infraestructura ferroviarias del Estado, Adif, se producirá antes de 2011 y supondrá una ventaja competitiva del principal puerto de Cataluña frente al Puerto de Valencia. El Corredor Mediterráneo, que pretende conectar las principales ciudades y puerto de la franja litoral este con Cataluña y Europa, sigue sin concretarse. La Comisión Europa debe tratar en abril el nuevo paquete de prioridades de las denominadas Redes Transeuropeas de Transporte.

El Gobierno central, a través del Ministerio de Fomento de José Blanco y la vicepresidencia de María Teresa Fernández de la Vega, ha transmitido su intención de que el Corredor Mediterráneo sea incluido en la lista para beneficiarse de subvenciones y facilidades de financiación. Sin embargo, las carencias presupuestarias de la Unión y la política de fomentar en mayor medidas iniciativas de colaboración público-privada pueden retrasar años la consecución de esta reivindicación histórica de los agentes sociales valencianos.

Fomento va a hacer coincidir la puesta en marcha del AVE Madrid-Valencia (prevista para el 19 de diciembre) con la apertura del tercer carril que conectará el Puerto de Barcelona con Girona-Figueres y a su vez con Portbou. Este proyecto ha contado con una inversión de 200 millones de euros procedentes del Ministerio del Fomento, pero también con ayudas europeas RTE (Redes Transeuropeas del Transporte) y financiación del Banco Europeo de Inversiones. Para llevarlo adelante se ha aprovechado la infraestructura de alta velocidad (AVE) de la línea Madrid-Barcelona-frontera francesa y se ha adecuado parte de la red de ancho convencional. El transporte de mercancías a través del ferrocarril es una de las apuestas de la UE para reducir emisiones de gases de efecto invernadero y la dependencia de combustibles fósiles.

Hasta ahora el transporte de mercancías se realiza principalmente por carretera y el tren apenas representa el 5% del volumen de tráfico. La rapidez y la logística son fundamentales para trasvasar tráfico de la carretera al ferrocarril.

La conexión ferroviaria de Barcelona con Europa y la posible tasa la transporte por carretera (Euroviñeta) puede ser incentivos, de los que ahora Valencia está descolgada.

La terminal valenciana duplica a la barcelonesa

Barcelona sigue lejos de Valencia como puerto de mercancías en tráfico de contenedores. Además, entre enero y agosto de 2010, la terminal valenciana ha presentado mejores registro de crecimiento que su competidor catalán. En los ocho primeros meses del año Valencia acumulaba 2,7 millones de TEU (unidad de medida equivalente a un contenedor de 20 pies) con un crecimiento del 12,56%. Barcelona presenta cifra muy inferior 1,2 millones de TEU, con un ligero aumento del 4%. La tendencia de tráfico sigue reforzando a Valencia como puerto de entrada del Mediterráneo. El año pasado, cuando la crisis arreciaba todavía más, Valencia cerró el ejercicio con 3,6 millones de TEU y un exiguo crecimiento del 1,4%. Por contra, Barcelona, con 1,8 millones de TEU y adonde los barcos tardan un día más en llegar, experimentaba un fuerte descenso de tráfico del 29,9% como consecuencia de la fuerte caída del comercio internacional.