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Salvador Navarro se estrenó ayer como presidente de Cepymev instando a las pequeñas y medianas empresas valencianas a "buscar alternativas al crédito bancario" en vista de que la crisis financiera, agravada por el encarecimiento de la deuda que provocó primero Grecia y ahora Irlanda, ha supuesto y va a suponer que "el crédito será difícil y costoso". Navarro, quien ejercía el cargo en funciones desde que el pasado junio José Vicente Morata lo abandonó al ser elegido presidente de la Cámara de Valencia, explicó que "la credibilidad del sistema financiero" es el "peligro" más preocupante al que tienen que hacer frente las pymes, porque ese sector que da acceso al dinero, aunque en su conjunto es "solvente" -"pero heterogéneo, sobre todo por la parte de las cajas"-, comenzó su reestructuración "tarde". El proceso "va lento y todavía no ha concluido", lo que "no ha contribuido a resolver el problema de confianza en los mercados internacionales" y ha añadido "dificultades en el acceso al crédito del propio sector y, con ello, a los hogares y empresas". Por ello, Navarro, quien fue elegido por aclamación de la asamblea de Cepymev, abogó, sin renunciar a que el crédito fluya hacia las pymes, por vías alternativas, como las "ampliaciones de capital, nuevos socios, mercado alternativo bursátil y demás fórmulas que permitan fortalecer nuestro pasivo a largo plazo".
Navarro, quien hizo una defensa de las pymes, porque "los vértices de las pirámides necesitan sustentarse en la base", lanzó una denuncia adicional contra las entidades financieras, a las que exigió "transperencia y juego limpio: que no ocurra, como ha ocurrido y sigue ocurriendo, que pequeños empresarios y empresarios autónomos se han visto obligados a suscribir swaps [intercambio futuro de bienes o servicios] sobre tipos de interés como presunto seguro a las subidas de tipos", de tal forma que "lo que se contrató como presunto seguro se ha convertido en una trampa muy costosa para la cuenta de resultados". Según Navarro, entidades financieras "de primer orden" que no mencionó se aprovechan "para enriquecerse sin ningún tipo de pudor". Por último, sin acusar a nadie, destacó el problema "de la morosidad, que estrangula nuestra tesorería y compromete la viabilidad de muchas empresas".
Cepyme aboga por
un máximo de dos candidatos en CEOE
El presidente de Cepyme, Jesús Terciado, se mostró ayer partidario del consenso entre los diversos candidatos a la presidencia de la CEOE y mostró su preferencia por que, en último extremo, solo sean dos los empresarios que opten al cargo. Al igual que el presidente de Cepymev, Salvador Navarro, Terciado aseguró que su organización no se ha decantado por ninguno de los cuatro nombres que ahora se mencionan. Sobre el apoyo público de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, a la persona de Manuel Pizarro, Terciado dijo que la política del PP "no forma parte del empresariado, no va a votar y el ámbito político debe estar absolutamente ajeno a los temas empresariales" y añadió que, aunque no la acusaría "de ponerse ella en escena" en este asunto, sí tiene claro que el presidente de su autonomía, Castilla y León, "no se le ha ocurrido nunca ni apoyar ni dejar de apoyar a ningún candidato".
