Valencia puede presumir de dos cosas. De tener la cesta de la compra de alimentos más barata de toda España y de ser la cuna (en realidad la sede social está en Tavernes Blanques) de la cadena de supermercados con precios más competitivos del país, Mercadona. Así se refleja en las conclusiones del Observatorio de los Precios del Comercio Minorista correspondientes al cuarto trimestre de 2010, que ayer hizo públicas el Ministerio de Industria.

La ciudad de Valencia se sitúa como urbe con precios más reducidos tras experimentar un descenso del 6,8% respecto al mismo trimestre del año anterior, lo que supone además la mayor bajada del país. En el extremo contrario si sitúa San Sebastián, la ciudad más cara de España a la hora de llenar la cesta de la compra de alimentos. La capital de Guipúzcoa presenta tarifas un 18% por encima de Valencia, aunque esta diferencia se ha reducido en dos puntos en el último año.

Compra alimentos también sale barato en Castelló de la Plana, que ocupa el tercer puesto en la clasificación de ciudades más económicas por detrás de Huelva. Alicante se sitúa por encima de la media en precios y alcanza el puesto trigésimo octavo (38º) pese a haber registrado una bajada de tarifas del 2,1% en el último trimestre de 2010.

La evolución interanual de precios en la alimentación es muy dispar en las ciudades analizadas, aunque son mayoría las que presentan evolución al alza. En 31 de ellas se ha registrado una tasa positiva. La más elevada es la de Ávila, con un 4,7%. El mayor descenso es el de Valencia.

Pese a los descensos interanuales, en el último tramo del año se ha producido un repunte generalizado con respecto al tercer trimestre en todo el Estado, que en el caso de Valencia ha sido del 1%.

En lo que se refiere a la guerra de precios de las grandes cadenas de distribución, la valenciana Mercadona está ganando la batalla, al menos en alimentación. La empresa que lidera Juan Roig se mantiene como la enseña más barata en la cesta de alimentación, seguida de Alcampo, Carrefour, Sabeco y Maxi-Dia, mientras que El Corte Inglés sigue apareciendo en el informe como el grupo con los precios más altos de España.

Esta tendencia es más evidente en la Comunitat Valenciana, donde Mercadona es la cadena de supermercados más barata en las tres provincias en el conjunto de la alimentación. Lo mismo ocurre con El Corte Inglés pero al revés. Es la distribuidora más cara de las tres provincias. No obstante, la clasificación varía en función de productos específicos. Por ejemplo, en pescados frescos en Valencia, el mercado del Cabanyal es el centro de venta más caro y Consum el más barato.