El trato preferencial que la Unión Europea (UE) garantiza a Marruecos no sólo se refleja en el próximo acuerdo agrario que entrará en vigor en el año 2013 , contrario a los intereses del sector citrícola valenciano dada la supresión de las barreras para la importación naranjera. El Ejecutivo de Bruselas también tiene comprometidos entre 2011 y 2013 hasta 135 millones de euros en ayudas para programas marroquíes de desarrollo rural y agrícola, según constata un informe de la oficina de la Unión Europea en Marruecos.
De esta cantidad, 70 millones se dirigen al llamado Plan Verde, es decir el proyecto con el que el Reino de Mohamed VI quiere cuadruplicar la producción del olivar y duplicar la de cítricos (para llegar a 3,19 millones de toneladas anuales) a partir de 2020 mediante subvenciones e incentivos fiscales para esos cultivos. El plan ha desatado en los últimos años la inversión extranjeras en territorio marroquí y alienta la especulación en los mercados hortofrutícolas. En las últimas tres décadas Bruselas ha facilitado 835 millones a Marruecos en planes de desarrollo rural y agrícola.
Competencia desleal
Tras casi tres años negociando el pacto que tiene que sustituir al suscrito en 2003, las organizaciones agrarias valencianas denuncian la referencia expresa de "apoyo de la UE a reforma del sector agrario marroquí en consonancia con el Plan Verde", advierte AVA-Asaja. La entidad destaca que se entremezclan otras cuestiones de carácter social y político. En su opinión, la competencia desleal de Marruecos se manifiesta en la calidad y el uso de fitosanitarios en las producciones del sur del Mediterráneo, pues superan los límites máximos de residuos. Además, la organización que preside Cristóbal aguado resalta la competencia desleal en materia laboral dada la falta de cobertura de la Seguridad Social, la explotación infantil y los salarios de los jornaleros hasta 15 veces más bajos que en España.
El Consell reclama a la UE un veto al acuerdo
La consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Maritina Hernández, ha reclamado al Gobierno central "una postura clara y definida" en relación al acuerdo agrícola alcanzado entre la Unión Europea y Marruecos y ha pedido al Ejecutivo que trabaje para conseguir que el Parlamento Europeo no ratifique este protocolo "claramente lesivo para los intereses de nuestros productores, en especial los sectores de los cítricos y el tomate". Hernández ha pedido al Gobierno que siga el ejemplo del Consell, "que durante los últimos meses viene trabajando junto a los eurodiputados del Partido Popular para fijar una posición común y sensibilizar a los miembros del Parlamento Europeo del importante perjuicio que supone para la agricultura española la aprobación de este texto en las condiciones pactadas". La consellera ha insistido en que la posición del Consell "va a continuar siendo igual de firme y contundente que hasta ahora, manteniéndonos al lado de las organizaciones agrarias y operadores del sector". En este sentido, ha criticado "el olvido al que el Gobierno español somete a los agricultores y ganaderos de nuestro país".
