El grupo que integran Cajastur, Caja Mediterráneo (CAM), Caja Extremadura y Caja Cantabria dejaría de ocupar el tercer puesto en el ránking nacional de cajas de ahorros para descender al décimo, si finalmente la caja alicantina sale del Banco Base (nombre provisional de la entidad que han conformado con su fusión "fría").

En ese caso, CAM en solitario también descendería al séptimo puesto, teniendo en cuenta para esta valoración únicamente los activos en millones de euros. De darse esta posibilidad, quedaría muy mermada la que fue la primera gran operación para reordenar el sector de las cajas, que ha marcado el paso y el modelo jurídico a las demás.

Cajastur ha sido una de las grandes protagonistas en el proceso de reordenación. Primero, al lograr la adjudicación del negocio financiero de Caja Castilla-La Mancha (CCM) al banco Liberta, filial de Cajastur, y sólo seis meses después, sin haber consumado esa operación, al lograr la fusión con sus tres socios para conformar el tercer grupo de cajas de ahorros del país por tamaño y el quinto grupo financiero nacional.

La intervención por el Banco de España de Caja Castilla-La Mancha en marzo de 2009, la primera que se producía desde el "caso Banesto", fue el preludio del vuelco que iba a dar el sistema español de cajas de ahorros.

La posterior intervención de la andaluza Cajasur, en mayo de 2010, fue el pistoletazo de salida de una intensa carrera en la que prácticamente todas estas entidades territoriales se veían obligadas a buscar aliados y cerrar acuerdos en tiempo récord. Era la única manera de cumplir con todos los requisitos exigidos por el organismo regulador del sistema financiero español para "aproximarlas al mercado".

En menos de un año, las 45 cajas de ahorros que había en España han quedado reducidas a 14, y previsiblemente serán menos en el futuro, ya que se está produciendo ya una nueva ronda de conversaciones para nuevas fusiones y en el sistema financiero se da por descontado una posterior integración entre bancos.

Ya se están dando nuevos pasos. Ayer se supo que Banca Cívica y Unnim mantienen conversaciones de cara a una posible integración que les permita reforzar sus niveles de capital y cumplir con las exigencias del Banco de España. Además, el consejo de administración de Banca Cívica celebró ayer su primera reunión en Pamplona, en la que aprobó la estrategia de capitalización que va a llevar a cabo en los próximos meses y que incluye sacar a bolsa entre el 25% y el 40 % de su capital.

Las cajas de ahorros tienen hasta el próximo lunes para enviar la Banco de España sus planes de viabilidad con respecto a los nuevos requerimientos de su "core capital"