Iberdrola se ha convertido en una bendición para sus accionistas y en un quebradero de cabeza para los consumidores. El gigante eléctrico español presentó ayer unos resultados espectaculares con un beneficio neto de 1.14,8 millones de euros entre enero y marzo. Se trata de una cifra récord en la secuencia de resultados trimestrales y representa un crecimiento del 10,1% con respecto al mismo período de 2010.
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, explicó los buenos resultados en una conferencia con analistas por la gestión y el modelo de negocio de la empresa, basado en el negocio básico y en los proyectos de internacionalización. Galán se congratuló de la generación de valor para los accionistas, que han recibido 10.000 millones de euros en dividendos en la última década, con una tasa de retorno por acción del 158%. El ejecutivo de la eléctrica, que a final de mes celebra la junta de accionista que debe aprobar la fusión con Iberdrola Renovables, aseguró que la empresa sigue teniendo potencial de crecimiento futuro y afirmó que tiene un valor de conjunto superior al de sus distintas áreas de negocio.
Galán destacó que las tres operaciones claves de 2011 son la aportación de capital de Qatar Holding, que refueza el núcleo estable del accionariado, la adquisición de la distribuidora brasileña Elektra y la absorción de Renovables.
En la misma conferencia con analistas, el director general de negocios de Iberdrola, José Luis San Pedro, explicó que el Ministerio de Industria deberá trasladar este año a las tarifas eléctricas el encarecimiento del coste de la energía, que previsiblemente se producirá, si quiere que no se exceda el límite de 3.000 millones de euros de déficit tarifario fijado como tope por el Gobierno para 2011. "Entendemos que el Gobierno va a cumplir los objetivos tarifarios siempre y cuando las subidas en el precio de la energía, que sí están previstas, se transformen en subidas tarifarias, porque si no lo hacen tendrán que bajar los peajes" y con ello reducir los ingresos regulados, dijo el directivo.
San Pedro también indicó que la demanda de electricidad ha caído un 1,6% en el primer trimestre en España, pero adelantó que Iberdrola prevé que el año se cierre con un incremento de entre el 1% y el 2% en esta variable.
En cuanto al proceso de colocación en los mercados del déficit de tarifa, pronosticó que la próxima semana se producirá la próxima emisión, por un valor cercano a 2.000 millones de euros. "Espero que la próxima semana salgan otros 2.000 millones y se mantenga el ritmo del Gobierno de hacer una emisión cada cinco semanas", aseguró.
