Atitlán, el fondo de capital riesgo que dirige el yerno de Juan Roig, Roberto Centeno, ya ha puesto encima de la mesa su oferta para hacerse con el 33 % de Ribera Salud, la concesionaria de los hospitales comarcales de Alzira, Torrevieja, Manises, Elx y Dénia. La propuesta de la familia Roig no ha trascendido al detalle pero pasaría por acometer una ampliación de capital e inyectar los fondos necesarios para mejorar el balance de la sociedad y favorecer la financiación de los planes de expansión. Atitlán no es el único aspirante invitado a participar en el accionariado. El fondo controlado por el Santander, Vista Capital, también ha presentado su oferta.

Sin embargo, la intervención de la CAM por parte del Banco de España puede complicar el desenlace de la operación. Ribera Salud está participada ahora al 50 % por Bankia y por la caja alicantina. Tras la destitución del consejo de administración, la jubilación de los principales directivos y el nombramiento de los gestores procedentes del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, la resolución del futuro de Ribera Salud ha quedado en manos de estos últimos. Su intención es realizar una valoración y estudio en profundidad de la CAM para sacarla a subasta al mejor postor a partir de septiembre, aunque tampoco se descarta que puedan trocear la entidad para colocarla por partes. Todo va a depender del interés de los aspirantes. Y el Santander es uno de ellos. Hasta ahora Atitlán contaba con el favor del Consell de Francisco Camps, sucedido por Alberto Fabra, y de los propios gestores de la caja. Pero en apenas unas semanas todo ese panorama ha cambiado.