El conseller de Economía, Industria y Comercio, Enrique Verdeguer, trasladó el martes a los máximos dirigentes de la patronal valenciana del metal Femeval que las "ayudas directas a las empresas son insostenibles" en una situación como la actual, tan crítica para las arcas de la Generalitat, según afirmó ayer a este diario el presidente de la citada organización, Vicente Lafuente, quien añadió que en idéntica situación se encuentran planes como el Renove para automoción. El encuentro se enmarca en las reuniones que el conseller está manteniendo con los principales sectores industriales de la Comunitat con vistas a los presupuestos de la Generalitat de 2012, que se presumen extremadamente restrictivos, dada el elevado endeudamiento autonómico.

Según Lafuente, Verdeguer les trasladó la intención del Consell de seguir apoyando al sector secundario valenciano, pero la realidad es muy tozuda y habrá que "priorizar actuaciones". En este sentido, el conseller trasladó a los empresarios del metal que el año que viene "gran parte" del dinero disponible de este departamento "se va a dedicar a liquidar deuda con las empresas y las organizaciones empresariales", que se encuentran en una situación ciertamente desesperada por los impagos de la administración pública. El presidente de Femeval puso como ejemplo al respecto a las patronales, que, como ya adelantó este diario, están con telarañas en su tesorería entre otros motivos por la morosidad pública. Según Lafuente, los planes de competividad y los de formación correspondientes a 2010 se han ejecutado ya pero las organizaciones empresariales aún no han cobrado por unos servicios que ellas sí han adelantado a sus proveedores". De ahí que muchas de ellas tengan "problemas muy serios" que se agravan por las dificultades de refinanciación que encuentran en las entidades bancarias. El dirigente del metal apuntó al respecto que, "si al final de año no han cobrado, algunas pueden tener problemas serios de funcionamiento" que podrían incluso provocar el impago de nóminas a sus trabajadores.

Solventar en la medida de lo posible la morosidad tendrá como consecuencia que "habrá menos dinero para dinamizar la industria". Según Lafuente, el conseller de Economía dejó en todo momento bien claro que la magnitud de los recortes que se prevén estará en función de las directrices que marque su homólogo de Hacienda, José Manuel Vela, en los Presupuestos de 2012. Entonces se verá qué sucede con los planes de competitividad, que en principios se mantendrán, al menos en sus objetivos, porque la intención del Consell es garantizar las ayudas sectoriales. Lo que no precisó Verdeguer en su reunión con Femeval es si esos programas "tendrán menos dinero, si se reducirá el número de sectores beneficiados o si se reformularán de otra manera".

Por contra, a los dirigentes de Femeval sí les quedo claro que las subvenciones directas tienen escaso futuro el próximo ejercicio. Se trata de ayudas distribuidas fundamentalmente por el Impiva y el IVEX destinadas, entre otros objetivos, a la innovación o la internacionalización de las empresas. Tanto la patronal provincial CEV como la Conselleria de Economía no pudieron cuantificar ayer el importe de esas subvenciones. El citado departamento de la Generalitat, no obstante, añadió que "resultaría aventurado adelantarse y asegurar que estas ayudas a las empresas van a verse mermadas", ya que "los presupuestos de la Conselleria todavía no están cerrados". "Lo que sí es seguro -añadió un portavoz oficial- es que desde el Consell se va a seguir aportando recursos a las organizaciones empresariales y ayudas directas y específicas a nuestras empresas". La misma fuente confirmó que "el conseller se comprometió a que, pese a las limitaciones presupuestarias y la coyuntura económica desfavorable, la Generalitat iba a priorizar el pago pendiente de las ayudas directas a las empresas" pero que "las ayudas a sectores productivos también van a seguir siendo una prioridad".