La patronal de fabricantes de vehículos Anfac reveló ayer en su último informe que las ventas de coches eléctricos continúan estancadas, sobre todo en la Comunitat Valenciana. Este organismo certifica que las matriculaciones en esta autonomía tan sólo se elevan a cinco, mientras que en España ascienden a 197 hasta el pasado mes de agosto. Estas cifras mejoran las raquíticas estadísticas del ejercicio anterior, si bien se quedan muy lejos de las previsiones oficiales del Gobierno, que en 2012 auguraba la circulación de 20.000 coches eléctricos en el conjunto del país, una previsión muy lejos de poderse alcanzar a la vista de los resultados. En cuanto a los híbridos (con motor de explosión de gasolina y eléctrico), las cosas van mejor. La Comunitat Valenciana ha matriculado 690 unidades, que supone una mejora del 38,28 % en comparación con el período enero-agosto de 2010. El coche eléctrico más vendido en España es el Peugeot iOn, seguido por el Citroën C-Zero y el Tesla Think City. Una de las razones que explican la escasa implantación de este tipo de modelos es la red de recarga, todavía muy reducida. La Comunitat Valenciana, impulsados por la Agencia Valenciana de energía, cuenta con al menos 39 puntos de recarga. Más del 90 % de las ventas se dirigen a flotas de empresas e instituciones.