El consejo de administración de Bancaja frenó ayer el nombramiento de Aurelio Izquierdo como nuevo director financiero de la entidad de ahorros. Izquierdo fue director general de Bancaja y director del área de negocios de Bankia hasta que el 7 de octubre el presidente de la caja, José Luis Olivas, lo nombró consejero delegado del Banco de Valencia. Tres semanas más tarde, Olivas dimitió como máximo responsable de la filial y le sucedió Izquierdo, quien estuvo en el cargo apenas un mes, hasta la intervención por parte del Banco de España el 21 de noviembre. Desde entonces estaba en excedencia, a la espera de que la caja le encontrara un cargo que justificara su sueldo de alta dirección. Se le encontró acomodo como director financiero, la responsabilidad que ejercía cuando en septiembre de 2009 fue nombrado director general.

La idea era que el consejo de administración de ayer procediera a su designación como alto directivo, pero las críticas efectuadas por varios consejeros, en especial los representantes de los trabajadores, paralizaron la designación al entender que los aproximadamente 200.000 euros que cobraría son una cantidad demasiado elevada para las funciones reales que debería ejercer. Y es que hay que tener en cuenta que la actividad financiera de la caja valenciana la desarrolla ahora casi exclusivamente Bankia, al que traspasó todo su negocio. Las fuentes consultadas aseguran que no se puede dar por anulado este nombramiento y que no sería de extrañar que Olivas, gran protector de Izquierdo, volviera a intentarlo, bajo otras formas, en próximas reuniones. Izquierdo fue sustituido ayer como consejero de NH Hoteles, por Manuel Lagares, en representación de Caja de Madrid.

Por otro lado, el consejo de Bancaja nombró, como estaba previsto, a Francisco Pons como nuevo vicepresidente ejecutivo del Banco Financiero y de Ahorros (BFA), en el que la entidad de ahorros tiene un 37 % del capital. El BFA es el propietario del 52 % de Bankia. El pasado día nueve, Pons, expresidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), ya fue nombrado vicepresidente ejecutivo de Bankia. En este cargo y en el del BFA sustituye al presidente de Bancaja, José Luis Olivas, quien dimitió de ambas responsabilidades el 21 de noviembre tras producirse la intervención por parte del Banco de España del Banco de Valencia, que también presidía desde 2004.

Hasta la fecha, Olivas ha mantenido su voluntad de terminar su mandato en Bancaja, que finaliza en 2016, lo que evita que Pons pueda ocupar su plaza. Como sucedió en la anterior reunión del consejo en que se sometió a aprobación la designación de Pons para Bankia, ayer se produjeron seis abstenciones, todas ellas del bloque progresista, aunque entre las mismas no estaban Ana Torres y Remigio Pellicer, dos empresarios nombrados a propuesta del PSPV. Estos seis vocales -de un total de 20- consideran que Pons es una persona idónea para el cargo, pero creen que la plaza debería ocuparla alguno de los miembros del consejo de administración.